El magnate Jeff Bezos desata la furia con sus músculos

Los músculos que gasta Jeff Bezos, más propios de un superhéroe que de un magnate, nunca pasan desapercibidos. Sus imágenes con el torso descubierto a bordo de su yate ya se han convertido en algo cotidiano. A sus 59 años está en plena forma y no disimula su satisfacción por la transformación física que ha conseguido en estos últimos años.

A golpe de gimnasio, su musculatura empieza a tener el peso de su fortuna, estimada en unos 169.000 millones de dólares. Podría estar en consonancia con sus ansias de inmortalidad. Bezos desea vivir al menos tres décadas más de lo que su naturaleza ha previsto para él. Invirtió una gran suma en Altos Labs, una start-up de reprogramación biológica creada para rejuvenecer células en el laboratorio, convencido de que la muerte es algo que se puede evitar si se trabaja en ello.

En impacto físico, su novia, la reportera estadounidense Lauren Sánchez, de 53 años, no le va a la zaga. La pareja empezó la relación en 2019, poco después de que el multimillonario anunciara su divorcio de su esposa MacKenzie, con la que se había casado en 1993. El compromiso formal se hizo en mayo de 2023 y, desde entonces, Bezos y Sánchez son inseparables. En verano disfrutaron de una larga travesía a bordo del Koru, la nueva adquisición del fundador de Amazon. El segundo barco más grande del mundo, con 127 metros de eslora y tres mástiles, fue hecho a medida para la pareja del multimillonario con una pieza central con la imagen de la periodista. Su precio, casi 500 millones de dólares.

Esta vez la ocasión de lucirse ha sido un posado para la edición de diciembre de la revista Vogue, cuyo rodaje no ha pasado desapercibido en redes.Su retrato, firmado por Annie Leibowitz, ha desatado numerosos comentarios, algunos de dudoso gusto. Como era de esperar, la exhibición de fuerza y amor ha sido recibida de forma desigual. “Nunca una foto me había incomodado tanto”, dice uno de los internautas. “Abstenerse de superheroizar y glorificar a los multimillonarios”, se lee en otra de las líneas.

Ajena al revuelo que provocaría la imagen, Sánchez ha aprovechado la entrevista en Vogue para hablar de su próximo matrimonio y de su decisión de adoptar el apellido de su esposo.