Diez ejercicios para mejorar la vista cansada

La presbicia o vista cansada está provocada por el envejecimiento natural del ojo, habitualmente, a partir de los 40 o 45 años. Se produce por la pérdida de flexibilidad de los músculos oculares, lo que provoca dificultades para enfocar de cerca con nitidez.

Actos tan cotidianos como leer un libro o los mensajes de un teléfono móvil se complican porque el cristalino, la lente natural de nuestros ojos, se vuelve más rígido, lo que dificulta el enfoque de los objetos que tenemos más cerca.

La presbicia afecta a 6 de cada 10 españoles, especialmente mayores de 40 o 45 años, según los expertos de General Optica.

Los primeros síntomas de esta afección son la dificultad para enfocar objetos situados a menos de un metro de distancia, necesidad de alejar los objetos para verlos con claridad, cansancio ocular, irritación, tensión ocular o dolor de cabeza tras llevar a cabo tareas que implican la visión de cerca o necesidad de quitarse las gafas graduadas si la persona padece miopía.

Pese a que la presbicia es un proceso natural y no tiene cura, algunos síntomas pueden mejorarse realizando algunos ejercicios con los ojos. Según recomiendan los expertos. se debe mantener una buena postura corporal, con hombros alejados de las orejas, cabeza recta, cuello relajado y mandíbula paralela al suelo.

Estos son los 10 ejercicios que puede llevar a cabo para retrasar los efectos de la vista cansada.

1. Masajes oculares. El primer paso es lavarse las manos y calentarlas frotándolas entre sí, con lo que se consigue que estén a una temperatura adecuada. El masaje debe comenzar por la frente, colocando los dedos índices justo por encima de la nariz. Después, se realizarán movimientos suaves y circulares hacia afuera a lo largo de la frente. Posteriormente se masajearán las sienes, por encima de los oídos, realizando movimientos circulares.

Para masajear los párpados, cerrar los ojos y realizar movimientos ligeros y circulares con los dedos anulares o medios, mientras que para masajear las cejas hay que utilizar los dedos índices o medios.

Otro método efectivo para relajar la zona es realizar muecas con la cara.

2. Girar los ojos. Con los párpados cerrados, girar los ojos en el sentido de las agujas del reloj diez veces y repetir el ejercicio en sentido contrario.

Otra opción es girar los ojos hacia la izquierda, con los párpados cerrados, pero sin forzar el movimiento ni notar tensión. Se mantiene la postura unos segundos y se repite el proceso mirando hacia la derecha. Por último, y siempre con los ojos cerrados, se giran los ojos hacia la derecha y la izquierda varias veces, suavemente.

3. Parpadear. Abrir y cerrar los ojos lentamente durante dos minutos y, a continuación, realizar un parpadeo rápido cada dos segundos.

Este ejercicio es recomendable si se han pasado varias horas leyendo, trabajando frente al ordenador o viendo la televisión, ya que es una forma de limpiar y lubricar los ojos de forma natural.

4. Mirar en zigzag. Colocar un bolígrafo frente a los ojos y moverlo en zigzag de derecha a izquierda mientras se sigue con la mirada. Repetir el ejercicio pero moviendo el bolígrafo de arriba a bajo. Repetirlo 10 veces.

5. Dibujar un 8 o un signo de infinito con la mirada. Imaginar que en la pared situada a menos de dos metros de distancia hay dibujado un ocho o el símbolo del infinito. Con la cabeza fija, sin realizar ningún movimiento, el ejercicio consiste en ir moviendo los ojos mientras se dibuja con la mirada el número o el símbolo, lentamente, primero en un sentido y después en el contrario. Para que sea efectivo hay que repetir el ejercicio varias veces, con un tiempo total de entre 3 y 5 minutos.

6. Ponerse bizco. Con este ejercicio se ejercitan los músculos oblicuos. Se debe repetir 10 veces

7. Enfocar de lejos y de cerca. Mirar primero un objeto situado cerca durante unos segundos y cambiar lentamente el enfoque hacia un punto más lejano. Lo ideal es realizar este ejercicio al aire libre, pero si no es posible, también se puede extender el brazo con la mano cerrada en un puño y el pulgar hacia arriba. Se enfoca primeramente el pulgar y, sin perderlo de vista, se va acercando la mano hacia la nariz. Repetir hasta completar 10 ciclos.

8. Hacer círculos con los ojos. Para realizar este ejercicio hay que imaginar un reloj situado en una pared cercana. Después, mover los ojos hacia las 12 y las 6 en punto, y después de las 9 a las 3 en punto. Tras hacer este movimiento se recomienda realizar movimientos circulares completos, primero en el sentido de las agujas del reloj y luego en sentido inverso, repitiéndolos entre 3 y 5 minutos.

9. Apoyar las manos en los ojos. Calentar las manos y situarlas sobre los ojos cerrados sin presionarlos. Respirar en esta posición tres veces profundamente. Este ejercicio resulta muy conveniente cuando se notan los ojos cansados, secos o irritados, y se puede repetir varias veces al día.

10. Relajar la vista. Con los ojos cerrados, colocar las manos en forma de cuenco delante de ellos, sin llegar a tocarlos. Después abrir los ojos y mirar en la oscuridad durante treinta segundos. Para una mayor relajación se pueden realizar masajes en la cara o el cuello.

En cualquier caso, si para leer los whatsapp del móvil tiene que alargar el brazo excesivamente, lo más recomendable que acuda a un óptico para que le dé un diagnóstico y le ofrezca una solución.