La automovilística Chery prevé crear 3000 empleos en Cataluña

El viaje relámpago del presidente de la Generalitat, José Montilla, a China no culminó ayer con acuerdo con Chery –un gigante de la fabricación de vehículos en el país asiático– para su desembarco en Cataluña, pero, a decir verdad, el pacto está bastante maduro. Según fuentes conocedoras de la reunión que Montilla mantuvo con la directiva de Chery y con el gobernador de la región de Anhui, el fabricante chino está prácticamente decidido a instalarse en Cataluña, lo cual generararía 3.000 puestos de empleo directo y 10.000 indirectos.

 Antes de formalizar su anuncio, Chery quiere realizar un último informe sobre la viabilidad del proyecto y, sobre todo, decidir dónde ubica la planta que instalará en Cataluña con capacidad para producir 300.000 vehículos pequeños y medianos convencionales –es decir, no eléctricos–. Existen tres opciones muy claras para montar la planta: Baix Llobregat (Barcelona), Alt Camp y Conca del Barberà (ambas en Tarragona). Las instalaciones de Chery serían mayores que las de Nissan en Zona Franca, pero menores que las de Seat en Martorell (estas últimas tienen las mayores dimensiones europeas).

Las conversaciones entre todas las partes están «muy avanzadas», según las mismas fuentes, pero hay un grupo de trabajo integrado por la directiva de Chery, inversores de Hong Kong y el Instituto de Investigación Aplicada del Automóvil (Idiada)–una de las mayores instalaciones europeas dedicadas a la investigación, desarrollo, ensayo y homologación de vehículos con sede en Santa Oliva (Tarragona)– para acabar de perfilar el proyecto del fabricante chino en Cataluña. Las conversaciones entre Chery y las autoridades catalanas se vienen desarrollando desde hace dos años y Montilla confiaba en cerrar ayer mismo el acuerdo, pero finalmente lo que obtuvo fue un protocolo de intenciones del fabricante chino.

En caso de que la inversión de Cherry no descarrile, sería la inversión industrial extranjera más importante en Cataluña en más de diez años y para buscar equivalentes habría que remontarse al proyecto que barajó Nissan de construir una nueva planta en Igualada (Barcelona) en 2006, una decisión que finalmente no se efectuó y en la que Cataluña perdió 400 millones de inversión.

Chery, controlada por capital público chino, fabricó en 2009 un total de 500.000 vehículos y crece a ritmos del 30 por ciento anual.


SAS despide a su plantilla
La empresa SAS Automotive ha presentado un expediente de cierre de su centro en Martorell (Barcelona) con fecha del 29 de julio que dejará sin empleo a la totalidad de su plantilla, de 124 trabajadores, según un comunicado del sindicato CCOO. Según la organización sindical, SAS argumenta que el cierre ha venido forzado por la decisión de la compañía de automóviles Seat de mantener un único proveedor y dar por terminado su contrato con SAS a partir del 30 de julio. El centro de SAS en Martorell está ubicado dentro de las instalaciones de Seat en este municipio y está especializado en el diseño y montaje de salpicaderos para automóviles.