San Lorenzo

Sin rastro de María tres semanas después

Vecinos y Guardia Civil reanudan la búsqueda de la joven. Han inspeccionado una depuradora y un monte de Boadilla. 

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Unos 300 vecinos de la localidad madrileña de Boadilla del Monte reanudaron ayer la búsqueda de María Piedad, la joven desaparecida en la noche del pasado 11 de diciembre tras la cena de Navidad de su empresa y cuya ex pareja apareció ahorcada la semana pasada en San Lorenzo de El Escorial. La directora de Protección Civil de Boadilla, Alicia Asensio, ha explicado a Ep que aunque la búsqueda no se ha detenido durante las celebraciones navideñas, sí han participado menos vecinos. No obstante, los vecinos que ayer se presentaron para colaborar han superado la media de quienes participan desde que comenzaron las labores de búsqueda (unos 150 o 200).

Asensio explicó que se ha hecho una batida desde las depuradoras hasta el polígono de Alcorcón y también por la zona de la carretera de Villaviciosa de Odón y la M-50. «Vamos camino de la zona del repetidor y vamos a volver a peinar esa zona porque ha llovido y se puede haber removido la tierra», ha explicado la directora de Protección Civil de Boadilla, que también ha recordado que hay «otro equipo que está entre las urbanizaciones de Las Lomas y Monte Las Encinas, la zona de túneles de la M-50», añadió.

En la búsqueda, que se desarrolla bajo las órdenes de la Guardia Civil, participa también la familia de la desaparecida: hermanos, primas y tías. Su ánimo, según Asensio, no es bueno, tras varias semanas de búsqueda. Ya es la tercera que pasan intentando encontrar tras una pista que les lleve a María sin lograrlo. En este sentido, se manifestó la delegada del Gobierno en Madrid, Amparo Valcarce, quien señaló que «en ningún momento» se dejará de buscar a María Piedad hasta que no aparezca ya que «es un compromiso con la sociedad madrileña pero también con su familia». Mientras tanto crece la incertidumbre sobre qué pudo ocurrir con María después de que se encontrara ahorcado a su ex pareja. Javier fue la última persona en verla ya que tras una cena de la empresa en la que ambos trabajaban, él se ofreció para llevarla a casa en coche. A partir de ese momento, no se supo nada más de ella.