Barcelona

Incógnita hasta el final en Cataluña

Los cinco cabezas de lista midieron por primera vez sus fuerzas en el debate a cinco de TV3 y hoy tienen el verdadero examen de la ciudadanía
Los cinco cabezas de lista midieron por primera vez sus fuerzas en el debate a cinco de TV3 y hoy tienen el verdadero examen de la ciudadaníalarazon

BARCELONA- La adrenalina ha mantenido a los candidatos en tensión hasta el último minuto. Y no es para menos. Las tres primeras posiciones están tan reñidas estas elecciones generales en Cataluña que el recuento de votos se prevé de infarto en los cuarteles electorales. ¿En qué medida pasará factura la crisis al PSC?, ¿las distancias, muy cortas en los sondeos, serán al final favorables para PP o para CiU?, ¿ERC, tras cambiar de cúpula en septiembre, será capaz de frenar la sangría de votos que sufre desde 2008? Los 5.396.313 catalanes llamados a las urnas –72.000 más que en las generales de 2008– para elegir a los 47 diputados catalanes del Congreso despejarán hoy las dudas.

Los socialistas confían en mantener su feudo, como ha ocurrido en las nueve elecciones generales anteriores, y para ello la candidata Carme Chacón se ha centrado en denunciar los «recortes sociales» del Govern y apelar al manido «miedo al PP». Los sondeos, no obstante, indican que la distancia abismal que separa ahora al PSC de CiU y PP –25 diputados (45,38% de los votos) por diez y ocho, respectivamente– no se va a repetir y, previsiblemente, la diferencia se podrá contar con menos de los dedos de una mano.

El duelo está tan igualado que los 31 diputados que se escogen en la provincia de Barcelona han llevado a que la lucha en la capital catalana y su área metropolitana haya sido encarnizada entre las tres formaciones. El motivo no es otro que el tradicional «cinturón rojo» ha dejado de serlo. Buena prueba de ello es que el PP, con Mariano Rajoy a la cabeza, inauguró la campaña en Castelldefels, localidad cuyo alcalde, Manuel Reyes, encabeza la lista al Senado. Jorge Fernández apostó por hacer otro de los actos estrella de la campaña en Badalona, donde el alcalde Xavier García Albiol arrancó sonoros aplausos con un discurso a favor de la seguridad sin complejos. Lo cierto es que la caravana del candidato popular ha peinado el área metropolitana. En Sabadell, Terrassa, Esplugues, Cerdanyola o Viladecans, Jorge Fernández no se ha cansado de repetir que es necesaria una mayoría fuerte para, unidos, salir de la crisis y reactivar la economía y el empleo. También ha recordado que los socialistas, con la complicidad de CiU, aprobaron el año pasado «el mayor recorte social» de la historia de nuestro país.
Romper la hegemonía

CiU, hegemónica en las autonómicas, no ha logrado nunca imponerse al PSC en unas generales y está por ver si su discurso centrado en pedir un nuevo modelo de financiación para Cataluña similar al concierto vasco tiene más gancho que la necesidad de salir de la crisis (PP) o la denuncia de los recortes sociales (PSC).El candidato de CiU, Josep Antoni Duran Lleida, ha disparado por igual contra PSC y PP, y, en cuanto a propuestas, se ha centrado en exhibir que es necesario el pacto fiscal que el president Artur Mas ha fijado como prioridad.

Otro frente de CiU está en Girona, donde Duran prometió esta semana que apoyaría una eventual ley sobre la autodeterminación que desea impulsar ERC. La pugna por el voto soberanista en esta demarcación, donde el reparto actual de escaños –PSC 3, CiU 2 y ERC 1– tiene visos de verse alterado, ha hecho que CiU radicalizara su discurso. A su vez, el PP aspira a recuperar el diputado que no tiene desde 2000.

ERC confía en mantener tres escaños, aunque puede perder alguno, lo que sería un castigo para la nueva cúpula que apostó por un candidato novel, Alfred Bosch. También se ha estrenado estos comicios el cabeza de lista de ICV, Joan Coscubiela, al que la encuestas dan una horquilla de uno a tres diputados.