Getafe

Cavero: inversión y tijera

Cavero: inversión y tijera
Cavero: inversión y tijeralarazon

MADRID- Aún no había jurado su cargo y el flamante consejero de Transportes e Infraestructuras, Pablo Cavero, ya recibía la que será su principal misión al frente de este área. Tendrá que reducir el gasto en subvenciones al transporte público y concluir la estructura directiva de Metro ajustándose a la receta que le recomendó ayer Esperanza Aguirre: «reduciendo el gasto». La tarea, que no tiene por qué implicar subir las tarifas del transporte público ni una privatización de la empresa que gestiona el suburbano, aseguró la presidenta regional, contará con Cavero, «orgulloso de formar parte de este gran equipo de líderes de la Comunidad de Madrid», como capitán.

A pesar de la hora, pasadas las dos de la tarde, el acto de toma de posesión del sustituto de Antonio Beteta al frente de Transportes llenó a reventar el área de presidencia de la Real Casa de Correos. En el antesalón a la sala donde se celebran los consejos del Gobierno no cabía un alfiler y Cavero, acompañado de familiares, amigos y el Gobierno prácticamente al completo, se autodefinió como un «hombre de Estado» y aseguró haberse tomado varias semanas antes de decidirse a abandonar la empresa privada por la administración. Su llegada al Ejecutivo regional, dijo, se debe a una «llamada interior» y es «vocacional», explicó durante el discurso que pronunció tras jurar su cargo. Ya en un encuentro con los periodistas, Cavero se refirió a su padre, ex ministro de UCD, como la persona de la que ha heredado la vocación política. «Es fundamental para la sociedad española que haya traspasos entre la empresa privada y la Administración pública», insistió el nuevo titular de Transportes, que no cierra las puertas a regresar al sector privado, aunque sea «con menos amigos». El consejero, que solicitó al menos «cien horas» de tregua a la Prensa para ponerse al día en sus nuevas responsabilidades, tiene claro su objetivo: «tratar de mejorar, si es posible, la calidad del servicio de los transportes e infraestructuras de los madrileños», a los que colocó en los primeros puestos desde su experiencia como usuario de los sistemas «de transporte público de la eurozona».

Soler, la única voz crítica
Sólo un detalle empañó, ya por la tarde, el nombramiento de Pablo Cavero. En una intervención en Onda Cero el alcalde de Getafe, Juan Soler, puso entre interrogaciones la decisión de Aguirre y aseguró que dentro del PP de Madrid había personas más cualificadas para el cargo.

Por otra parte, la presidenta regional confirmó ayer que propondrá a Rosa María Posada para ocupar la vicepresidencia de la Asamblea en sustitución de Cristina Cifuentes. Su nombramiento se votará en Pleno el 2 de febrero.

Aguirre ficha a dos concejales de Botella
El goteo de altos cargos tras las elecciones generales no cesa. Con el nombramiento de sus nuevos gabinetes, Mariano Rajoy dejó vacantes 25 plazas en el Ejecutivo de la Comunidad de Madrid. Unos puestos que Esperanza Aguirre ya ha comenzado a cubrir, pero que seguramente no restablezca en su totalidad en su objetivo por adelgazar una administración en la que, dijo, «sigue habiendo mucho gasto innecesario». Así, además de al consejero de Transportes, la presidenta ha hecho dos nuevos fichajes para su Gobierno. Dos nombres que salen precisamente de otra administración «tocada» por Rajoy, el Ayuntamiento de Madrid. Así, Aguirre contará con Luis Asúa, hasta ahora concejal de Chamberí, y Elena González Moñux, responsable del Consistorio de la capital en el distrito de Fuencarral-El Pardo, como nuevos «números dos» en las consejerías de Medio Ambiente y Justicia. Asúa será viceconsejero con Ana Isabel Mariño y González Moñux tomará posesión como viceconsejera de Justicia y Administraciones Públicas.