Trabajadores y empresas españolas pagan más impuestos que en Europa

Madrid- Aviso a declarantes. La ministra de Economía, Elena Salgado, enmendando la plana al ministro de Fomento, José Blanco, quiso dejar constancia hace dos días de que el Gobierno no planea más subidas de impuestos en 2011. Si bien Blanco trató de vender a la opinión pública que la carga fiscal que soportan los españoles es de las más bajas de la UE, y por tanto habría recorrido para nuevos incrementos en los impuestos, la realidad es que España soporta una de las cargas fiscales más altas de la OCDE en dos de los impuestos más relevantes. Los españoles realizan un esfuerzo fiscal (relación entre el impuesto y el salario medio) del 121,89%, sólo por debajo de italianos (130,5%) y portugueses (165,3%). Si bien la presión fiscal de España (33,90%) está por debajo de la media europea (39,60%), el salario medio de un trabajador de la eurozona es un 50% superior al nuestro, de ahí que el esfuerzo fiscal sea mucho más elevada. En la actualidad, los españoles ganan un promedio de 22.802 euros anuales brutos, mientras que la media de los países de la eurozona se sitúa en 34.000 euros.

Además, que nuestra presión fiscal sea más baja que la de la UE no significa que tengamos impuestos más bajos que nuestros vecinos. Un claro ejemplo es el Impuesto de Sociedades. En España el tipo general es del 30% y el reducido del 25% para pymes, mientras que la media de la UE es del 23,2%. Lo mismo ocurre con el IRPF. Según el último informe de la Comisión Europea, el tipo máximo es del 43% frente a una media del 37,5% de la UE.
Sólo en el IVA pagamos un tipo menor del 18% desde el pasado 1 de julio frente al 20,2% de media de los países competidores.

Nuestra presión fiscal ha bajado en los dos últimos años de crisis no porque lo hayan hecho los impuestos, sino porque los ingresos han caído a consecuencia de la crisis económica. De hecho hay que recordar que el Gobierno ha subido los impuestos. En junio del año pasado elevó los del tabaco y los combustibles. En enero incrementó el IRPF al suprimir la deducción de los 400 euros y hace dos meses entró en vigor la subida del IVA.

¿Ajustes o reformas?
Aunque Salgado no habló de subir impuestos sino de realizar «pequeños ajustes para favorecer la equidad», el secretario general de los técnicos del Ministerio de Hacienda (Gestha), José María Mollinedo, pidió ayer más cambios. En declaraciones a RNE, Mollinedo afirmó que se debería hacer una reforma fiscal de «mayor calado». En concreto se refirió al Impuesto de Sociedades, donde dijo que existen algunas «distorsiones».

ANÁLISIS
La crisis reduce la presión fiscal
- ¿Es cierto que la presión fiscal se ha reducido en los últimos ejercicios?
–La presión fiscal es la relación entre los ingresos que recauda un país en concepto de impuestos y cotizaciones sociales y su Producto Interior Bruto. El hecho de que el Gobierno alardee de que este parámetro se ha reducido en los últimos años nada tiene que ver con la política tributaria llevada a cabo por el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero y sí con la crisis económica en la que está inmersa España.

- ¿Entonces, ¿los impuestos no han bajado?
–Todo lo contrario. Buena prueba de ello es la subida del IVA en dos puntos porcentuales el pasado 1 de julio. En junio de 2009, el Gobierno subió los impuestos especiales del tabaco y los carburantes, medida que podría repetir en los próximos meses.

- ¿Qué ha sucedido?
–Que, como consecuencia del parón de la actividad económica, el Estado ha recaudado menos impuestos. Al dividir esta cifra por el PIB el resultado tiene que ser necesariamente menor.

- ¿Por qué se ingresa menos?
–Las empresas, al ver reducidos sus beneficios, han pagado menos por el impuesto de sociedades. En el caso del IRPF, el aumento del paro ha disminuido el número de trabajadores ocupados. Hasta el IVA se ha resentido, al descender el consumo de las familias.

- ¿Cómo evolucionará en el futuro?
–Si la economía consolida su crecimiento la presión fiscal subirá automáticamente.