Huelga general

«Todos a la calle» en una plaza vacía

La asamblea preparatoria de la acampada y la manifestación del 12-M/15-M apenas tiene seguimiento. Los periodistas y los curiosos, más numerosos que los indignados

«Todos a la calle» en una plaza vacía
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BARCELONA- Al cierre de esta edición, no había acampada aún en la plaza Catalunya de Barcelona por parte del colectivo del 15-M. Apenas una veintena de indignados se acercaron ayer a última hora a este céntrico espacio. El objetivo era celebrar una asamblea, 24 horas antes de la «okupación» oficial, que tendrá lugar hoy tras una manifestación convocada a las 18.00 horas.

En la plaza existía un ambiente más bien desolador. Algunos curiosos, indigentes y pocos indignados. Ahora el colectivo se llama 12-M-15-M y su objetivo es, de nuevo, «ocupar la calle» hasta el primer aniversario del «movimiento», que será el próximo martes.

Más de la mitad de los asamblearios, sentados en el centro de la plaza, estaban fumando porros mientras duró el «debate». No se trató nada en concreto, pero se habló de los «roles a seguir». «Roles» para organizar plataformas, «roles» de contención, «roles» de debate.... La asamblea avanzó mientras se discutía cuanto tenía que durar cada intervención. No hubo acuerdo concreto, pero se apuntaron algunos nombresde personas que se ofrecían a ejercer los citados «roles».

Sin conclusiones, la asamblea decidió, como ya era sabido, que cada día hasta el martes se celebrará una asamblea en la plaza Catalunya, que en estas ocasiones si que irá acompañada de acampada. La intención de los indignados es pernoctar hoy en este espacio, e ir, decidiendo, de nuevo en más asambleas, si se sigue hasta al día siguiente. Es decir, que cada asamblea deriva en otra, y así sucesivamente. Lo mismo que el año pasado.

La noche avanzó con más porros y más debate. Los jóvenes, todos con aspecto «okupa», sólo estaban preocupados de que se podría decidir en la siguiente asamblea, en un bucle sin fin. Mientras, los curiosos seguían mirando, y a lo lejos, dos patrullas de la Guardia Urbana observaban la escena. A partir de hoy, está prevista la presencia de furgones de los Mossos d'Esquadra, que grabarán todo lo que suceda con sus microcámaras. La «bienvenida» ya la tienen: una pequeña pancarta rezaba «ahora eres Mosso, antes quizá fuiste persona». No había muchas más, y la mayoría eran las mismas que el año pasado, es decir, una mera copia de los lemas del mayo de París de 1968. Sobre ellas, una bandera griega, el modelo a seguir.

Sin grandes concentraciones, hubo algún incidente. Una fotógrafa fue increpada por los indignados, y otro fue «invitado» a abandonar la asamblea. «¿Eres tonta o qué?», le espetaron a la joven fotógrafa. El argumento era que «estaban trabajando», en un momento de la asamblea en el que se estaba decidiendo si el límite de cada intervención era de tres minutos o de menos. Así transcurrió la noche, con cannabis y hostilidad hacia los periodistas, pese a que aseguran que las asambleas son demócraticas y abiertas a todo el mundo.