Pasarelas

Las Infantas faltaron a su tradicional cita con «Telva» por Jesús Mariñas

Bertín Osborne y Fabiola Martínez
Bertín Osborne y Fabiola Martínezlarazon

La sombra de las Infantas sobrevoló el pasado lunes en la noche de los premios «Telva», que ellas siempre presidieron con su elegancia. En los 21 años de historia de esta gala –que es también pasarela y escenario de distinción–, sólo habían faltado en dos ediciones. La ausencia de Doña Elena me la certificó Nieves Fontana a última hora, y la Infanta Cristina tampoco pudo acudir porque sigue en Washington.

 Todo estilista reconocido ha dejado su impronta en la cita, algo que pudo apreciarse esta vez con Blanca Cuesta haciendo alarde de ampulosidad gracias a la capa de su traje verde. Vicky Martín Berrocal acudió con su nueva pareja y también estuvo presente Luis Medina, que lo intenta de nuevo con Alejandra Rojas, aunque a ella le desaconsejaban cualquier reanudación de su historia, algo que arrancó los suspiros de la maternal condesa de Montarco, quien llegó del brazo de uno de los premiados de la noche, el modisto Elio Bernhanyer. Mariló Montero epató con un pavé de brillantes y zafiros, y Antonio Cano dejó impronta con su elegancia «a la catalana».

En el menú, el semigazpacho, con fuerte regusto a ajo (¡y eso que era una cena!), y como escenario, la fría espectacularidad del interior del nuevo Ayuntamiento de Madrid, utilizado por primera vez como cenador. Imponía la estancia, donde las invitadas se realzaron en la escalinata de lo que fue Palacio de Telecomunicaciones. Laura Vecino impactó con un modelo de Dior en rojo vivo. María León evitó fotos con el ex marido de Claudita Stianopoulos, con el que se casa en abril la hija pequeña de Pitita. Susanna Griso estaba casi galáctica con un imponente modelo Giorgio Armani que rompía el costumbrismo circundante. Su fina estampa se diferenció de la abundancia de ampulosidades y gasas prodigadas en todos los tonos –incluso el berenjena de Cecilia García–. Luis Galliusi concretó almuerzo con su tocayo Sartorius, y Barbie López con Borja Thyssen y Blanca. Rosalía Cogollo olía a la nueva fragancia del mago perfumero Serge Luten y María Zurita impactó con sus enormes pendientes sobre un Berhanyer rojo encendido.

Fabiola Martínez estuvo rendida a Bertín Osborne, prototipo de elegancia con esmoquin escocés, y el duque de Feria destacó con una afabilidad que últimamente no prodiga. Siempre chic y distinta, Begoña Zunzunegui recibía felicitaciones por el reciente enlace toledano de una de sus nietas con los Pérez Tabernero. Lo testificaba Ana Fariña, esposa de Alipio, ante Julio Ayesa, con el bronceado más fuerte de la noche. Bibiana Fernández destacó vestida en tonos azules, al igual que la morena y exuberante Yamaia Wright, estilista de la cantante Beyoncé, con ceñido traje en rosa chicle.