Barcelona

Hereu evita dar explicaciones sobre las irregularidades de la consulta

El equipo municipal intenta extender las responsabilidades sobre los problemas de la consulta a CiU y ERC.

La agrupación del PSC de Horta es un punto de votación
La agrupación del PSC de Horta es un punto de votaciónlarazon

Barcelona- La reforma de la Diagonal va camino de convertirse en el mayor quebradero de cabeza de la carrera política del alcalde de Barcelona, Jordi Hereu. Sin embargo, el gobierno municipal ha decidido cerrar filas alrededor de su líder, ajeno a la lluvia de críticas que está recibiendo el Consistorio. Que el Palau de la Música en pleno brindara un sonoro abucheo al alcalde de Barcelona el pasado miércoles no parece asustar al ejecutivo barcelonés.Tanto es así, que el bipartito municipal defendió ayer a capa y espada el proceso participativo de la Diagonal. La autocrítica, si la hay, quedará reservada para cuando finalice la consulta. El cuarto teniente de alcalde de Barcelona, Ramon García Bragado, reconoció que se deberá abrir un «debate en profundidad» sobre el funcionamiento de la consulta, aunque, al más puro estilo pujoliano, aseguró que «ahora no toca». No será hasta el domingo que el ejecutivo empezará a analizar las fortalezas y debilidades de su proceso participativo.Según Bragado, el Consistorio está dispuesto a asumir «responsabilidades» aunque, a modo de advertencia, dejó caer que éstas deberán ser «compartidas». El edil socialista tiene claro que las bases que regulan la consulta son «fruto de un proceso de negociación política» que contó con el respaldo de CiU y ERC, a los que pretende hacer corresponsables del problema. El bipartito municipal no está dispuesto a asumir en solitario el coste del fracaso a menos de dos años de las elecciones municipales y mira hacia otro lado ante el acoso de la oposición, que ha encontrado en la consulta sobre la reforma de la Diagonal su mejor arma par debilitar al Consistorio barcelonés. La comisión municipal de Presidencia se convirtió ayer en un «ring» dónde la oposición golpeó con fuerza al gobierno municipal. Sin embargo, no consiguieron ninguna explicación del ayuntamiento sobre los problemas de la votación. Los fallos del sistema informático y la falta de garantías legales fueron las principales críticas que esgrimió la oposición. La edil del PP Àngels Esteller volvió a criticar que el Consistorio no permita que haya interventores en los centros de votación, así como que no retire la publicidad. Los populares consideran que la consulta «se ha vuelto en contra» del Ayuntamiento y criticaron «el todo vale» con el que actúa el Consistorio. Horas antes, el líder del PP en Barcelona, Alberto Fernández, había denunciado que la sede de la agrupación de Horta del PSC se ha convertido en punto de votación, al margen de los autorizados por el Ayuntamiento. La denuncia de los populares llegó un día después de que CiU hubiera puesto sobre la mesa la existencia de casi una treintena de puntos de votación no autorizados. Ante este panorama, los nacionalistas volvieron a exigir dimisiones en el Ayuntamiento. El portavoz del grupo municipal de CiU, Joaquim Forn, tachó de «caos» la gestión de la consulta y llegó a llamar «autista» al bipartito municipal.

Votación perdidaPopulares y convergentes unieron sus fuerzas para hacer prosperar una proposición, gracias la abstención de Esquerra, que entre sus preceptos obliga al Ayuntamiento a retirar la publicidad de las opciones A y B de la consulta para garantizar la «neutralidad» del proceso. El texto exige, además, la máxima «transparencia» en el recuento de la votación autorizando la presencia de un representante de cada grupo municipal. CiU y PP exigieron al bipartito que respete estos preceptos. Sin embargo, no parece que PSC e ICV vayan a cambiar sus planes. Mientras Bragado criticaba el «mal estilo» de la oposición, el teniente de alcalde Ricard Gomà acusó a CiU y PP de «menospreciar» la democracia por no respaldar la consulta. No será hasta el domingo cuando se conocerán los resultados de la polémica consulta. De momento, la participación no llega al nueve por ciento.

Fernández: «El PSC usa sedes para votar»El presidente del grupo municipal del PP, Alberto Fernández Díaz, denunció ayer que el PSC está utilizando sus sedes para votar en la consulta de la Diagonal, al margen de los 108 oficiales ya existentes. Se trata de la agrupación municipal del PSC en el barrio de Horta. Según Fernández, hechos como este confirman que «la consulta es innecesaria y vergonzosa, además de suponer un despilfarro inaceptable».