Messi se reserva un lugar en la historia

MADRID- Los tres goles logrados ante el Sevilla en el Camp Nou han situado a Messi en un puesto privilegiado entre los goleadores en la historia del Barça. El triunvirato de los 130 goles lo componen, además del rosarino, el brasileño Rivaldo y Samuel Etoo, dos jugadores fundamentales en el equipo durante los trece últimos años. La diferencia está en que Messi, a sus 23 años, puede superar con creces la cifra en la que se encuentra actualmente. La historia vuelve a encontrarse con el argentino.

Los éxitos y los records de Leo no son flor de un día. El jugador debutó con el primer equipo en 2005 y, desde entonces, su progresión ha sido estratosférica. La pasada temporada entró en el selecto grupo de diez máximos goleadores de la historia del club catalán; ahora se sitúa en el séptimo puesto de la clasificación histórica. Por delante de él están mitos que vistieron la zamarra blaugrana: César (235), Kubala (194), Samitier (178), Escolá (164), Alcántara (137) y Arocha (134). Asimismo, el argentino ya ha superado a otros jugadores que marcaron una epoca en el equipo, como Stoichkov (117), Kluivert y Rexach (122), Eulogio Martínez (111) y Luis Enrique (109).

La capacidad de Messi para decidir partidos por sí mismo, como quedó demostrado en el partido de vuelta de la Supercopa ante el Sevilla, es la nota diferenciadora. Si aquellos jugadores fueron consumados expertos de cara a la portería, el de Rosario aúna regate, potencia, buen manejo del balón... Todo esto lo sitúa a 105 goles del genio goleador del Barcelona de los años 40 y 50, César. Con una extensa carrera deportiva por delante, el número «10» del Barça cuenta con credenciales para romper todos los records en el club.

La Liga será, una temporada más, otro de los títulos que el equipo de Guardiola intentará revalidar. El trofeo de máximo goleador aparece, una vez más, en el horizonte del delantero azulgrana. Messi es Bota de Oro 2010 en un pulso goleador mantenido con su compatriota Higuaín y el portugués Cristiano Ronaldo hasta final de temporada. Lionel resolvió la situación con una anotación final de 34 tantos, siete más que «El Pipita» y uno más que el de Madeira.

El delantero del Barça mantiene su ambición goleadora un año más, a pesar de no haber brillado con Argentina como se esperaba en el Mundial de Suráfrica. Messi se resarció en su vuelta al Camp Nou y marcó anteayer al Sevilla tres de los cuatro goles del partido. El club de la Ciudad Condal conquistó la Supercopa de España y Messi anotó su séptimo triplete con la camiseta azulgrana. Al término del partido, el rosarino hizo gala de su tradicional hermetismo y declaró: «Estoy muy contento con los tres goles». Además, aprovechó para atribuir su éxito, una vez más, al trabajo colectivo del equipo. Porque los éxitos de Messi también son triunfos para sus compañeros.

El FC Barcelona comienza la Liga el próximo domingo con una visita a El Sardinero, en donde los defensas del Racing de Santander volverán a tener un referente primordial para el marcaje. Lionel, tras sus tres tantos en la Supercopa, estará de nuevo entre los objetivos de la retaguardia cántabra. Si Messi consigue su tanto número 131, él no se pondrá por delante del resto. Y es que el argentino no se equivocaba al asociar su hazaña a la labor del equipo; un conjunto que, aunque tiene a varios de los mejores jugadores del mundo, sigue fiel a la ideosincrasia de «La Masía»: el grupo prima sobre las individualidades y los triunfos se consiguen entre todos.