Barcelona

Fallece el expresidente asturiano Sergio Marqués tras sufrir un infarto

El expresidente del Principado Sergio Marqués, el único jefe del Ejecutivo regional del PP en los casi treinta años de autonomía asturiana aunque finalizó su mandato expulsado de este partido, ha muerto hoy a los 65 años tras sufrir un infarto cuando salía de su despacho de abogados en Gijón.

Tras desplomarse al suelo, Marqués fue atendido por facultativos de los servicios sanitarios de urgencias en la calle, junto al portal del inmueble que ocupa su despacho, y, tras más de una hora de atención, fue estabilizado para que pudiera ser trasladado en una UVI móvil al Hospital de Cabueñes, donde falleció poco después.

Nacido en Gijón en 1946, Marqués se licenció en Derecho en la Universidad de Oviedo y, tras ejercer como abogado y como director de una empresa del sector del metal, trabajó durante varios años en Puerto Rico antes de regresar a España para ser director comercial de la firma Isidro Jover y Compañía (PULLIGAN) en Barcelona.

Miembro fundacional en Gijón de la Alianza Popular impulsada por Manuel Fraga en 1977, inició su carrera política de forma paralela a otro joven valor de la derecha gijonesa, Francisco Álvarez-Cascos y, diez años después, fue elegido diputado autonómico, cargo en el que continuó durante cuatro legislaturas hasta el año 2003.

En las autonómicas de mayo de 1995, Marqués encabezó la candidatura del PP y logró 21 diputados, a dos de la mayoría absoluta, pero la falta de acuerdo entre el PSOE, con 17 escaños, e IU, con 6, le permitieron formar gobierno en minoría.

En ese periodo, el PP ganó las elecciones generales de 1996 y vio como su principal valedor para haber sido candidato, Álvarez-Cascos, unía a su cargo de secretario general de esta formación el de vicepresidente del primer gobierno de José María Aznar.

En sus tres primeros años de mandato Marqués tuvo que buscar el apoyo en la Cámara del único diputado del Partido Asturianista (PAS) y de un parlamentario tránsfuga de IU para sacar adelante sus presupuestos hasta que en 1998 estalló la crisis con las direcciones regional y nacional del PP, cuyos principales dirigentes le acusaban de actuar de forma descoordinada con los órganos del partido.

A estas críticas, iniciadas por entonces el alcalde de Oviedo, Gabino de Lorenzo, se sumó Álvarez-Cascos, que llegó a afirmar que prefería "partido sin gobierno que gobierno sin partido"e hizo que el Grupo Parlamentario del PP le retirara su confianza mientras Marqués denunciaba "presiones abyectas para forzar dimisiones".

Tras varias dimisiones en el seno de su Ejecutivo, el PP planteó una moción de censura que no prosperó y Marqués continuó gobernando hasta el final de la legislatura con el único respaldo de los cuatro diputados que rechazaron los criterios de la dirección popular.

De cara a las autonómicas de 1999, el entonces presidente impulsó la creación de Unión Renovadora Asturiana (URAS), una formación de cuño regionalista que logró tres escaños en unos comicios en los que el PSOE logró la mayoría absoluta e inició un periodo de gobierno que se prolongó durante tres legislaturas.

Cuatro años después, URAS no logró ya representación en la Cámara y buena parte de sus dirigentes fueron regresando al PP mientras que el partido de Marqués optaba por concurrir en 2007 y 2011 en coalición con sus antiguos aliados del Partido Asturianista sin lograr tampoco acceder al Parlamento regional.

La inesperada muerte de Marqués, que había sufrido algunos problemas de salud en los últimos años, ha causado una profunda consternación en el mundo político, empresarial y sindical del Principado que ha reaccionado de forma unánime destacando la dignidad y entereza que marcaron su trayectoria política.

Así, Álvarez-Cascos, después de que el Gobierno en funciones que preside decretase tres días de luto oficial, ha asegurado durante su visita al tanatorio gijonés donde quedó instalada la capilla ardiente que Marqués "ocupa por méritos propios un lugar en la pequeña historia de la comunidad autónoma".

También el candidato socialista a la Presidencia del Principado, Javier Fernández, ha destacado su dignidad política en los difíciles momentos que afrontó en el Gobierno, aspecto que también han destacado cuatro expresidentes asturianos del PSOE (Pedro de Silva, Juan Luis Rodríguez-Vigil, Antonio Trevín y Vicente Álvarez Areces).

Por su parte, la dirección del PP de Asturias, el partido de Marqués durante más de veinte años, ha mostrado su respeto por su figura mientras que el actual presidente de URAS, Javier López Alonso, ha augurado que "con el tiempo"la sociedad reconocerá la trayectoria política y la "gran labor"de Marqués.

Casado y con cuatro hijos, el funeral por Marqués, el primer presidente que fallece de los seis que ha tenido Asturias desde que accedió al autogobierno en 1983 -al margen del socialista Rafael Fernández en la etapa preautonómica-, se celebrará mañana por la tarde en la iglesia de San Pedro de Gijón.