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Dos periodistas de Afp desaparecidos

La agencia francesa de noticias France Presse (Afp) indicó hoy que desde hace tres días no tiene noticias de dos de sus enviados especiales a Libia, que se habían desplazado al este del país.

Dave Clark, de 38 años, y Roberto Schmidt, de 45, habían informado por correo electrónico a la agencia el pasado viernes por la noche de su intención de ir el sábado por la mañana a una treintena de kilómetros de la ciudad oriental de Tobruk para encontrarse con opositores al régimen de Muamar al Gadafi.

Según Afp, los dos viajaban junto con el fotógrafo de la agencia Getty Joe Raedle, pero desde entonces no han podido establecer contacto con ninguno de los tres hombres.

Clark trabajaba para la sede de la agencia gala en París y se encontraba como enviado especial en Libia desde el pasado 8 de marzo, mientras que Schmidt, fotógrafo en la delegación de Nairobi, había sido enviado al este del país el 28 de febrero.

No son los primeros periodistas desaparecidos o arrestados desde el inicio del conflicto en el país. Este mismo sábado, la cadena de televisión qatarí Al Yazira informó del arresto por parte de las autoridades libias de cuatro de sus reporteros, incluidos un noruego y un británico.

La UNESCO condenó la semana pasada la violencia ejercida contra los periodistas en Libia y deploró que la muerte de un cámara de Al Yazira a mediados de mes haya llevado esas intimidaciones y ataques "a un nuevo extremo".


En libertad los periodistas del New York Times


Por otra parte, el gobierno de Libia dejó hoy en libertad a los cuatro periodistas del diario The New York Times que fueron capturados cuando cubrían los enfrentamientos en ese país, indicó el periódico.

Los cuatro periodistas, que habían entrado en Libia sin un visado y que fueron detenidos en la ciudad de Ajdabiya, fueron entregados hoy a custodia de diplomáticos de Turquía.

Los periodistas son Anthony Shadid, ganador de dos Pulitzer y responsable de la oficina del diario en Beirut, el redactor Stephen Farrell, que fue secuestrado por los talibanes en 2009 y rescatado por fuerzas británicas, y los fotógrafos Tyler Hicks y Lynsey Addario.