Sevilla

Griñán ocultó recortes sociales

Hacienda cambió el documento original de previsiones de ingresos ante la presión de la oposición.

Los diputados socialistas aplaudieron de nuevo las medidas del presidente de la Junta
Los diputados socialistas aplaudieron de nuevo las medidas del presidente de la Juntalarazon

Decía recientemente el ex presidente Felipe González que «rectificar es de sabios y de necios tener que hacerlo a diario». La frase bien puede ejemplificar lo que pasó ayer en la segunda jornada del Debate sobre el Estado de la Comunidad, donde justo antes de votar las propuestas de resolución, un documento de la Consejería de Hacienda desveló que el presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, omitió en su discurso del miércoles una parte sustancial de la subida del IRPF anunciada a los «ricos», ya que incluía la limitación y en algunos casos eliminación de deducciones fiscales del tramo autonómico del impuesto sobre la renta a las que hasta ahora podían optar todos los andaluces.

Como todas las comunidades autónomas, Andalucía tiene parcialmente cedido el IRPF, lo que le permite regular sus propias desgravaciones fiscales. Los residentes en Andalucía se benefician por deducciones en alquiler de vivienda habitual, por adopción de hijos en el ámbito internacional, para sujetos pasivos con discapacidad o para familias monoparentales, entre otros. Pues bien, todas esas ventajas fiscales, en el plan original del Gobierno andaluz, sufrían una nueva regulación que Griñán no enumeró, con la excusa de no hacer «tedioso» el Debate, según explicaban por la mañana desde la Junta.

La realidad es que el presidente, tras detallar el miércoles las nuevas medidas de carácter recaudatorio –subida de tramos en el IRPF, impuesto a la banca, tasa a las bolsas de plástico o el céntimo sanitario– acabó este punto señalando que «procederemos a la revisión de los beneficios fiscales en los distintos impuestos sobre los que la comunidad autónoma tiene competencias, con criterios de progresividad y no duplicidad». Pero no añadió, ni tan siquiera a modo explicativo, en qué consistirían.

Esa agenda paralela, que luego fue rectificada a última hora del día de ayer, incluía la aplicación de un límite de renta de 19.000 euros en tributación individual y de 24.000 en tributación conjunta para generar el derecho a la aplicación de todos los beneficios fiscales andaluces en el IRPF. En la práctica dejaba fuera a muchas rentas medias y no sólo a los que ganaban más de 80.000 euros.

Era el caso de las ayudas familiares de 50 euros por hijo menor de tres años. La ayuda por adopción de hijos en el ámbito internacional pasaba de 600 a 300 euros y, entre otras, se limitaba la deducción de cien euros que perciben las familias monoparentales.

Estas medidas sorprendieron incluso a miembros del propio Gobierno andaluz, que desconocían el alcance de las modificaciones de las deducciones fiscales, mientras que desde el PP se acusaba a Griñán de «mentir y de fraude».

La solución llegó a última hora del día con un nuevo documento de Hacienda –anunciado en la radio pública por la consejera de Presidencia, Mar Moreno– que incluía los mismos cálculos pero sólo referidos a aquellos que ganan más de 80.000 euros, es decir, los «ricos». En lugar de 35.946 afectados, el número es de 1.661, es decir, aquellos que dentro de los 21.859 que ganan más de 80.000 euros se benefician de las desgravaciones fiscales. Lo único que sí mantiene es la equiparación en Actos Jurídicos Documentados y Transmisiones Patrimoniales de la vivienda protegida y la de renta libre y lo que tendrán que pagar los «ricos»: los 10.699 declarantes del primer tramo –entre 80.000 y 100.000– abonarán 81 euros de media más; hasta 120.000, 4.108 declarantes y 382 euros; y más de 120.000, 7.052 personas que desembolsarán 4.052 euros.