Literatura

Literatura

No hay omegas sino dosis por Miguel Ángel ALMODÓVAR

No hay omegas, sino dosis, por Miguel Ángel ALMODÓVAR
No hay omegas, sino dosis, por Miguel Ángel ALMODÓVARlarazon

En un simposio recientemente celebrado en Madrid se han puesto sobre el tapete varias y muy esperanzadoras novedades sobre los salutíferos efectos de los ácidos grasos omega-3. El profesor norteamericano Kenneth Honn ha expuesto sus investigaciones sobre su potencial para ralentizar el crecimiento tumoral y la evitación de metástasis, mientras que nuestro científico José Ordovás apuntaba que los omega-3 pueden ser capaces de reducir sustancialmente el estrés metabólico que sufre el sistema celular, como consecuencia de los rápidos cambios en los estilos de vida y en los ritmos circadianos. Se unen estos hallazgos a todo lo ya sabido sobre otros innumerables beneficios, pero ante la benéfica avalancha conviene recordar que esos efectos tienen lugar si la dosis diaria es la oportuna y terapéutica, porque si sigue valiendo el viejo aforismo médico de que no hay venenos sino dosis, lo mismo cabe decir en contraposición positiva. Lo que en «roman paladino» equivaldría a decir que menos «enriquecimientos» y mucho más pescado azul, nueces y suplementos calibrados.