Barcelona

Rosell deja fuera de su equipo ejecutivo a sus rivales electorales

La patronal debe decidir en los próximos días la salida que dará al hasta ahora su presidente, Díaz Ferrán.

El nuevo presidente de la CEOE, Juan Rosell (c), junto a los miembros de su junta directiva Arturo Fernández (2 izda), Jesús Terciado (2 dcha), Pilar González de Frutos y Rafael Ferrando, hoy en Madrid.
El nuevo presidente de la CEOE, Juan Rosell (c), junto a los miembros de su junta directiva Arturo Fernández (2 izda), Jesús Terciado (2 dcha), Pilar González de Frutos y Rafael Ferrando, hoy en Madrid.larazon

La CEOE vivió ayer los últimos coletazos de la sucesión de Gerardo Díaz Ferrán. Juan Rosell designó a su nuevo equipo ejecutivo, del que ha dejado fuera a sus adversarios electorales los presidentes de la CEA y de Ametic, Santiago Herrero y Jesús Banegas, respectivamente. Rosell ha optado por premiar a los dirigentes empresariales que le han llevado desde Barcelona hasta su nuevo despacho en Diego de León 50, cuartel general de la patronal en Madrid. Como muestra de su agradecimiento, a partir de ayer forman parte de su reducido y selecto «círculo de confianza». Se trata de un grupo integrado por nueve vicepresidentes y el secretario general, amén del presidente, que será más manejable y ágil a la hora de tomar decisiones en un futuro inmediato.

Así se lo propuso por la mañana a la junta directiva de la CEOE, que dio su plácet por unanimidad al nuevo comité ejecutivo y a la reducción del número de vicepresidentes desde los 21 existentes hasta la fecha hasta los nueve actuales. En la lista de los elegidos figura en un puesto de honor, vicepresidente primero, el todopoderoso presidente de los empresarios madrileños, Arturo Fernández, que puso toda su maquinaria al servicio de Rosell durante el período electoral .


Colaboración empresarial
El presidente de Cepyme, Jesús María Terciado, será el nuevo vicepresidente nato en cumplimiento de los estatutos de la CEOE. Además, Rosell ha incorporado a su equipo a los presidentes de las patronales valencianas y aragonesas, que le brindaron también su respaldo durante los comicios empresariales. Mientras, Herrero y Banegas pasan a engrosar la larga lista de vocales del comité ejecutivo, compuesto por un máximo de 46 miembros.
Según fuentes empresariales, Rosell justificó la ausencia de Herrero a las dificultades que entrañan disminuir el número de vicepresidencias sin que haya este tipo de bajas. Acto seguido, destacó el papel de los anteriores vicepresidentes. La remodelación sacrifica también a representantes de sectores estratégicos como los de la energía (Unesa), Pedro Rivero, o la agricultura (Asaja). Sin embargo, la junta directiva bendijo el nombramiento como vicepresidentes de honor de la institución de Juan Manuel de Mingo Contreras y de Carlos Pérez de Bricio.

La junta dejó ayer para otra jornada sin decidir el futuro de su presidente saliente. En un futuro inmediato deberá decidir el papel que tendrá Díaz Ferrán, que se vio obligado a anticipar dos años las elecciones de la CEOE, presionado por los problemas de quiebra que acuciaban a sus empresas.

Este asunto no formaba parte del orden del día en la reunión de ayer, pero Rosell pretende mantenerle ligado a la organización otorgándole la Presidencia de la Fundación CEOE, si bien está dispuesto a no hacerlo si su nombramiento encuentra mucha oposición en los órganos de dirección. La breve reunión que celebró ayer la junta se completó con unas escuetas palabras del nuevo máximo responsable empresarial, que no llegaron ni siquiera a la categoría de discurso. El nuevo líder de los patronos españoles explicó a su equipo el encuentro que mantuvo un día antes con la vicepresidenta segunda del Gobierno, Elena Salgado. Esta reunión transcurrió en un tono de absoluta cordialidad y cortesía propio de una entrevista de bienvenida y presentación del máximo responsable de la CEOE.

Durante el encuentro, Rosell le expuso sus proyectos. Así le trasladó su defensa de una modernización de la patronal con la desvinculación de la organización empresarial de los partidos políticos para dotarla de una mayor independencia. Además, ofreció a la vicepresidenta económica la colaboración de los empresarios para salir cuanto antes de la crisis económica. Y es que Rosell es un firme defensor de involucrar todavía más a la clase empresarial en las decisiones necesarias para que la reactivación económica llegue a España el próximo año. Por eso se muestra partidario de respaldar por dolorosas que sean las reformas estructurales pendientes, como la del sistema público de pensiones.