Despidos

Una filial del grupo ZZJ se beneficiará de la venta de imágenes de Canal Sur

La sociedad se quedará el 35% de la comercialización del archivo de la televisión pública

Pablo Carrasco, en su última comparecencia en la comisión parlamentaria de la RTVA
Pablo Carrasco, en su última comparecencia en la comisión parlamentaria de la RTVAlarazon

SEVILLA- El director general de la Radio Televisión de Andalucía (RTVA), Pablo Carrasco, comparecerá mañana en la comisión parlamentaria encargada del ente público para explicar, a petición de IU, en qué situación queda el archivo documental de la entidad, tras conocerse una licitación para su explotación; punto sobre el que los diputados del PP también reclamarán información.

Según ha podido saber LA RAZÓN, los sindicatos expresaron a la dirección del ente público sus temores en relación a una supuesta «privatización del contenido del archivo de Canal Sur Televisión». La respuesta de la empresa, según consta en un texto al que ha tenido acceso este periódico: «El archivo no se privatiza, se digitaliza y sin coste para RTVA».

En dicho escrito se admite la convocatoria el pasado mes de abril de un concurso público para adjudicar la comercialización, «sin exclusividad», de parte del archivo público audiovisual. La dirección explica que la empresa adjudicataria «será la encargada de gestionar la venta» de las imágenes de Canal Sur sin generar ningún gasto y, además, «está obligada a digitalizar 13.200 horas de material».

Según el acuerdo con dicha sociedad, el 65% del precio de venta de ese material será para la RTVA y el resto –un 35%– para la empresa adjudicataria, que «obviamente, es la que ha presentado las mejores condiciones, a juicio de la mesa de contratación».

¿De qué empresa se trata? Pues, según se reconoce en la propia nota, de «una filial del grupo ZZJ en el que el actual director general de la RTVA desempeñó funciones análogas, antes de volver al ente», que ahora encabeza.

Un vínculo entre Carrasco y la sociedad adjudicataria que la dirección matiza en dos sentidos. Primero asevera que el director general «se inhibe, es decir, no participa, en cualquier toma de decisión que esté relacionada con el grupo ZZJ». Y segundo, tras recordar que éste tomó posesión del cargo que ocupa en la actualidad en la RTVA en noviembre de 2008, desgrana que en 2009 la facturación del grupo ZZJ con el grupo autonómico «se redujo un 36% respecto al año 2008». Una caída que «si analizamos el volumen facturado en 2011», añaden, se elevaría hasta «el 70%». «Por tanto –advierten desde la dirección– insinuar, aunque sea de forma velada, cualquier tipo de trato de favor, es simplemente ruin».

E insisten: «Este concurso fue ganado por una empresa del sector con experiencia en comercialización y venta de contenidos audiovisuales. Esta medida supone la posibilidad de abrir nuevos mercados para RTVA y por tanto nuevas fuentes de ingreso, ya que el principal porcentaje de esta venta revierte en Canal Sur TV».

La sociedad adjudicataria podrá realizar este trabajo durante cuatro años y, según la RTVA, ese tipo de comercialización no excluirá que el departamento de venta –«booking»– propio del ente público «siga con su actividad comercial habitual» ni pondrá en peligro puestos de trabajo.

En el documento se hace referencia también a la «alusión sindical» sobre que el proceso de digitalización se debería hacer con los recursos propios del ente autonómico. Petición que para la dirección «carece de sentido». Argumentan que «ya se han digitalizado los servicios informativos o el proceso de la continuidad de las emisiones, como han hecho todas las televisiones (públicas y privadas). Sin embargo, ninguna de ellas tiene personal de plantilla que cada cierto número de años se dedique en exclusiva a realizar un proceso de estas características para el que se requiere profesionales muy específicos».

Pese a que algunas fuentes apuntan que «la explotación del archivo de Canal Sur, uno de los principales patrimonios con los que cuenta la empresa, se ha hecho tradicionalmente desde dentro», la dirección asegura que «la comercialización del archivo, de las imágenes, no es algo nuevo». «Se ha hecho siempre a través de ‘booking', de forma directa y/o a través de terceros que, lógicamente, han sido retribuidos por esa intermediación comercial», replican a los sindicatos.