Almonte

Reaparece un acusado del «caso Malaya» al saber que podía ser detenido

El procesado José María Mellado, acusado de blanqueo de capitales en el juicio del caso Malaya contra la corrupción, se ha presentado este mediodía en la vista oral tras saber que podía ser detenido, aunque minutos más tarde ha abandonado la Sala al sentirse indispuesto.

El presidente del tribunal que enjuicia el proceso, José Godino, ha ordenado que un forense examine al acusado y ha pedido a su letrado, Juan Carlos Martínez, que le informe de "su situación".

Horas antes, Godino había advertido de que ordenaría su detención e ingreso en prisión si no comparecía antes de que finalizara la presente sesión del juicio, dado que ayer también estuvo ausente sin justificación.

José María Mellado ha sido trasladado al Instituto de Medicina Legal, ubicado en la misma Ciudad de la Justicia, para que el médico forense determine si está capacitado para asistir a la vista oral.

Mellado, natural de Almonte (Huelva), está imputado de un delito de blanqueo de capitales por el que se enfrenta a una petición fiscal de dos años de prisión y una multa de 140.000 euros.

Presuntamente adquirió en 2005 participaciones de Torquemada de Hostelería que, según el fiscal, fue la sociedad utilizada por Juan Antonio Roca para la explotación de los servicios de restauración del hotel La Malvasía, situado en la Aldea de El Rocío, en Almonte.

El ministerio público mantiene que Mellado "conocía que el dueño del hotel era el señor Roca", que era "quien lo explotada y dirigía"y que, no obstante, aceptó participar en los "mecanismos de ocultación ideados a tal efecto", con lo que supuestamente asumió "su colaboración en el encubrimiento del origen de los fondos y de la identidad de su verdadero titular".

El juicio del caso Malaya comenzó el pasado 27 de septiembre con 94 de un total de 98 procesados, ya que uno está enfermo -el tasador José Mora- y otros tres se encuentran en busca y captura: el empresario José Manuel Carlos Llorca y los ex ediles del Ayuntamiento de Marbella Francisco Javier Lendínez y Carlos Fernández.

Durante la cuarta sesión del juicio, los abogados han continuado hoy exponiendo las cuestiones previas, entre ellos Javier Saavedra, que representa al ex alcalde de Marbella Julián Muñoz, y José Rebollo, que defiende al empresario José Ávila Rojas.

Saavedra ha centrado sus alegaciones en la vulneración de derechos fundamentales, y ha proclamado la inocencia de su cliente.

El ex alcalde de Marbella Julián Muñoz sería "un hazmerreír"en una clasificación de corruptos, ha afirmado su abogado, quien ha sostenido que, de ser ciertos los delitos que se le imputan en el procedimiento, sería "el alcalde corrupto más barato de España".

La acusación "ofende al sentido común", según Saavedra, quien ha aludido a un supuesto pago por parte del presunto cerebro de la organización, Juan Antonio Roca, después de preparar la moción de censura que desbancó a Muñoz de la alcaldía el 13 de agosto de 2003.

Roca y Muñoz "son unos malversadores, pero eso sí de una honestidad entre ellos que es entusiasmante", ha ironizado Saavedra, quien ha referido que después de pelearse e insultarse y de preparar una moción de censura contra el ex alcalde, el ex asesor de Urbanismo supuestamente le abonó 12.000 euros -de un total de 180.000 euros que presuntamente percibió- porque era "un caballero".

Por su parte, la defensa de Ávila Rojas ha calificado la detención de su cliente de "innecesaria, desproporcionada"y practicada con "extrema crueldad", y ha dicho que "chirría en un Estado de derecho".

En las cuatro sesiones celebradas de este juicio, el mayor contra una trama de corrupción municipal conocida en España, ya han expuesto sus argumentos la mitad de los abogados de los 95 procesados.