Cataluña

Mas avisa que la privatización de El Prat esconde «un gato encerrado»

El sector empresarial catalán ve como una oportunidad el anuncio del Gobierno

Cataluña reivindica entrar en la gestión de El Prat para «poder competir en igualdad de condiciones» con Barajas
Cataluña reivindica entrar en la gestión de El Prat para «poder competir en igualdad de condiciones» con Barajaslarazon

BARCELONA- El anuncio ayer de la privatización del 49 por ciento del aeropuerto de El Prat ha dejado un regusto amargo entre los partidos catalanes. Mientras los sectores empresariales mostraron su agrado ante la medida, la esfera política no escondió su escepticismo. No en vano, el anuncio del presidente del Gobierno hace referencia al capital del aeropuerto, no a la gestión.

El líder de CiU, y futuro presidente de la Generalitat, Artur Mas, se mostró muy escéptico ante la propuesta gubernamental y señaló que «hay gato encerrado». A su juicio, el Gobierno, al conservar el 51 por ciento, se reserva el control de la infraestructura, por lo que «esto es querer dar una sensación de que se ganará mucha autonomía cuando el Estado se reserva el control a través de la mayoría». «No queremos que los aeropuertos catalanes estén gestionados por un Gobierno a 600 kilómetros y de forma homogénea respecto a otros aeropuertos que no tienen nada que ver con los nuestros», añadió. Mas, pues, reclamó que la decisión debe tomarse de forma consensuada con la Generalitat porque «no somos una diputación provincial».

El consejero de Obras Públicas en funciones de la Generalitat, Joaquim Nadal, calificó de «noticia importante» la propuesta de privatizar Aena, pero instó también a aclarar la «única incógnita» de «cuál sería el papel institucional del Gobierno de la Generalitat en los temas concernientes al aeropuerto de El Prat».

«El Gobierno deja una puerta abierta» que «facilita» que Barajas y El Prat «puedan competir entre ellos» y también para que «el Ejecutivo autonómico tenga un papel determinante en el sistema aeroportuario catalán». A propósito del papel de la Generalitat, Nadal añadió que «es una cuestión que se podría resolver a través de un comité aeroportuario de carácter territorial en el que el Gobierno autonómico tenga una presencia determinante, en los términos que habíamos estado hablando con los secretarios de Estado de transportes que sucesivamente se han hecho cargo de esta responsabilidad en el Gobierno de España».


El viernes, los detalles
Con el decreto ley del viernes se dará finalmente desarrollo a una reforma del modelo aeroportuario que fue anunciada en agosto de 2008 por la entonces titular de Fomento, Magdalena Álvarez. En aquel momento, sin embargo, se dijo que la privatización de la gestión de aeropuertos no llegaría al 30 por ciento de su capital y que la Comunidad de Madrid y Cataluña tendrían un papel determinante en la gestión de Barajas y El Prat, respectivamente.

Por su parte, la Cámara de Comercio de Barcelona , la patronal Cecot y Fomento del Trabajo valoraron positivamente la privatización del aeropuerto, aunque se preguntan cuál será el papel de las administraciones catalanas en este nuevo modelo.

El primer teniente de alcalde del Ayuntamiento de Barcelona y responsable de promoción económica de la ciudad, Jordi Wiliam Carnes, recibió con «prudencia» el anuncio, si bien manifestó su satisfacción porque «se haya movido pieza en esta vieja reivindicación de la ciudad».

El secretario general de ERC, Joan Ridao, se mostró mucho más escéptico y apuntó que cree que Zapatero da un nuevo paso «a favor de los grandes sectores económicos en lugar de apostar por el interés general», y lamentó que el 51 por ciento de las participaciones se quedarán «en Madrid» y el 49 por ciento «puede caer en manos extranjeras».