Barcelona

Cuando el altavoz es uno mismo

Espacios como The Private Space, los cines Maldà o la nueva editorial Standard Books son un claro ejemplo de esta vía.

Jordi Cussó
Jordi Cussólarazon

BARCELONA- Sin el empeño de Coppola por sacar adelante –mano a mano con George Lucas– su productora American Zoetrope, el celuloide se habría perdido genialidades como «Apocalypse Now». Si Mark Wahlberg no hubiese leído el libro de Nelson Johnson en el que se basa la multipremiada serie «Boardwalk Empire», no habría aportado parte de los 60 millones de presupuesto y Steve Buscemi se habría quedado sin su Globo de Oro hace unos días.
Hace falta empeño, olfato, ganas y dinero para difundir con éxito una obra artística. En Barcelona, donde miles de artistas buscan su hueco, la autoproducción se erige como vía cuando las instituciones miran a otra parte.
Es el caso de Jordi Cussó, un joven director de cine y videoclips, que ha optado por autoproducir su último mediometraje «Quan el cansament venç la bellesa» y que ha encontrado en los cines Maldà la horma de su zapato. El proyecto, protagonizado por Marc Garcia Coté y Joan Crosa, se estrenará el próximo jueves en la sala, sin instituciones y patrocinios de por medio. «La instalación es coqueta, no cobramos demasiado y tenemos un trato cercano», defiende Rafael Dalmau, propietario de la sala y firme defensor de alternativas a las salas comerciales. «La independencia del artista y el creer en uno mismo son factores clave para avanzar», defiende Cussó.
En la misma línea se encontraban el fotógrafo Román Yñán y el diseñador gráfico Txema Alguacil, que en 2010 se estrenaron en el mundo editorial con Standard Books. Su primera incursión ha sido el libro «Andergraun», un compendio de fotografías realizadas durante el rodaje de «El Cant dels Ocells» de Albert Serra. Ahora preparan la «Publicación experimental fotográfica», un paquete de tres revistas de fotografía, monografías, editadas en un formato que se acaba convirtiendo en un solo libro a modo de anuario. Roger Guaus, Daniel S. Álvarez y Juan Diego Valera serán los primero a estrenarse en la revista. «No encontrábamos lo que nos gustaba y decidimos aventurarnos, optamos por las series limitadas a un precio asequible para buscar nuestro hueco», defiende Yñán.
Otro alumno aventajado en la autodifusión es José Manuel Macrillante, propietario de la galería-imprenta The Private Space. Especialista desde hace 20 años en preimpresión, comprendió la «dificultad de los artistas para difundir su obra» y creó un proyecto en el que poder editar sus libros de forma controlada y exponer en la galería sin comprometer sus derechos de autor. Publicaciones con «espíritu de coleccionismo» y calidad a bajo precio en la que artista y productor ganan a partes iguales. «Hay mucha emergencia necesitada de difusión, lo importante es facilitar el camino», defiende Macrillante.