Tiempo muerto en el juicio por la mayor fortuna de Francia

Lo llaman ya el «Bettencourtgate». Comenzó como un conflicto familiar de altos vuelos, pero hay ingredientes de sobra para que el litigio que enfrenta a la heredera de L'Oréal, Liliane Bettencourt, de 87 años, con su hija a cuenta de la gestión de la fortuna se haya convertido no sólo en culebrón del verano sino en un asunto de Estado. Por medio se cruzan dinero, intereses, espías, política y poder.

La última pincelada de suspense la dio ayer la Justicia gala al decidir aplazar «sine die» el proceso que sienta en el banquillo a François-Marie Banier, un conocido fotógrafo de 63 años, al que Françoise Bettencourt-Meyers, hija de la multimillonaria, acusa desde 2007 de aprovecharse del frágil estado de salud de su madre y de unas supuestas disminuidas facultades mentales para dilapidar el patrimonio familiar.

Varias investigaciones han acreditado que desde finales de los noventa, en el espacio de una década, el artista ha atesorado un botín cercano a los mil millones de euros en donativos, obras de artes, inmuebles y seguros de vida que Liliane Bettencourt, la mujer más rica de Francia, asegura haber concedido «voluntariamente». Desde la muerte de su marido, hace tres años, la rica heredera y su protegido, son inseparables.

Sin embargo, Banier, que se enfrenta a tres años de cárcel y 375.000 euros de multa tendrá que esperar para responder ante los tribunales del cargo de «abuso de la fragilidad mental» sobre su mentora, que hasta la fecha se ha negado a someterse a todo examen neuropsiquiátrico solicitado por la Justicia.

Los nuevos elementos aportados a la instrucción explican el aplazamiento de un proceso «nauseabundo» y «falto de equidad», según calificaron ayer los abogados de la octogenaria y de su beneficiario. Unas grabaciones ilegales que atestiguarían, según la hija de Liliane Bettencourt, la falta de lucidez y discernimiento de su madre y la manipulación de la que sería víctima. Es el motivo por el que la magistrada pidió ayer una investigación complementaria que determine las condiciones en que se realizaron esas grabaciones y la repercusión que pueden tener en el caso que tiene como telón de fondo la sucesión al frente del grupo L'Oréal del que los Bettencourt son los principales accionistas.

El ministro y su esposa
Precisamente la reciente aparición y filtración a la prensa de ese lote de conversaciones privadas, grabadas clandestinamente por un mayordomo en el domicilio de la multimillonaria, es lo que confiere a este affaire su dimensión política ya que, entre otros, ha resultado salpicado un ministro del Gobierno de Sarkozy, el que fuera responsable del Presupuesto hasta marzo de este año, cuyo nombre se cita en el marco de una posible operación de fraude fiscal pues Bettencourt poseería dos cuentas en Suiza por valor de 80 millones de euros y una isla en Seychelles sin declarar al fisco. Una situación que, según su entorno, se dispone inmediatamente a regularizar.

Pero si el ministro Eric Woerth, hoy encargado de pilotar la reforma estrella de Nicolas Sarkozy, la del sistema de pensiones, ha desmentido todo trato de favor hacia la millonaria, el cargo de su esposa, Florence Woerth, como gerente de la sociedad gestora de la fortuna de Liliane Bettencourt hasta su dimisión hace unos días, ha debilitado su posición. Y ha disparado las acusación de «conflicto de intereses» por parte de la oposición, que ve la posibilidad de desgastar al jefe del Estado.


Los protagonistas del caso

Liliane Bettencourt / Heredera del grupo L'Oréal
La multimillonaria de 87 años es la mujer más rica de Francia con una fortuna cercana a los 17.000 millones de euros. Su única hija, Françoise Bettencourt-Meyers, con quien mantiene un litigio sentimental acusa al protegido de su madre de manipularla para granjearse una fortuna personal de mil millones de euros.

François-Marie Banier / Fótografo y pintor
A sus 63 años es el beneficiario de los mil millones de euros «generosamente» cedidos por Madame Bettencourt en concepto de regalos. Este «dandy» de profesión como algunos lo describen, amigo íntimo del matrimonio Bettencourt desde los 60, es conocido por tener una agenda de contactos muy influyente.

Eric Woerth / Ministro de Asuntos Sociales
Fue también el ministro del Presupuesto entre mayo de 2007 y marzo de 2010. Tesorero del la UMP, partido de Sarkozy, del que Liliane Bettencourt es donadora. Hoy en entredicho tras aparecer en unas conversaciones privadas sobre un presunto fraude fiscal por parte de la multimillonaria, cuya fortuna gestionaba su mujer.