París

Sarkozy revalida a Fillon al frente de un Gobierno escorado a la derecha

Alliot Marie releva al socialista Kouchner al frente de Exteriores y Juppé vuelve al Gobierno como titular de Defensa.

Nicolas Sarkozy y Francois Fillon
Nicolas Sarkozy y Francois Fillonlarazon

Tras cinco meses anunciando una importante remodelación, el presidente Nicolas Sarkozy ha optado por la continuidad al renovar ayer su confianza a François Fillon al frente del Gobierno. No porque fuera su candidato favorito, sino porque la candidatura del actual primer ministro se ha impuesto por su propio peso. Porque, pese a vivir a la sombra del «hiperpresidente», Fillon, más popular entre la opinión pública, ha logrado ganarse la confianza de los parlamentarios de la mayoría conservadora gobernante, la UMP, reacios al aterrizaje del centrista Jean-Louis Borloo a la cabeza del Ejecutivo, como Sarkozy habría deseado.


El hasta ahora ministro de Ecología encarnaba la sensibilidad social que el presidente francés pretendía imprimir a la acción política del próximo año y medio, la segunda fase de su mandato, con la vista puesta en los comicios presidenciales de 2012. La salida de Borloo, que renunció expresamente a participar en el futuro equipo «para recuperar la libertad de palabra y de proposición» podría suponer la reorganización de la aliada familia centrista y su divorcio de los conservadores. Un deseo que ayer expresó el también saliente Hervé Morin, ex ministro de Defensa, miembro del Nuevo Centro, y que denunció la falta del equilibrio del nuevo Gobierno, cuya composición comparó a «un equipo de campaña de la UMP».


Reducido de 37 a 30 miembros, de los que más de la mitad se mantienen aunque con distintos cargos, el nuevo Gabinete, compuesto de fieles del presidente, certifica además el fin de la apertura a la izquierda. El socialista Bernard Kouchner abandona la cartera de Asuntos Exteriores, que retoma la chiraquiana Michèle Alliot Marie, hasta ahora al frente del Ministerio de Justicia.
La entrada de otro incondicional de Chirac, el ex primer ministro Alain Juppé, que asume Defensa, consituye la principal novedad, así como el retorno de Xavier Bertrand al Ministerio de Trabajo, donde sustituye al malogrado Eric Woerth, cuyas aspiraciones a primer ministro se vieron truncadas por su relación con el escándalo Bettencourt.