Teherán

EE UU no descarta tener que quedarse en Irak

El comandante de la Fuerza Multinacional en Irak, general Raymond Odierno, no descarta el que las tropas estadounidenses tengan que permanecer en el país árabe más allá de la fecha límite para su retirada total, prevista para 2011, si bien sólo en calidad de asesores o contingentes puntuales.

Los generales David Petraeus, jefe en Afganistán, y Ray Odierno, al mando en Irak
Los generales David Petraeus, jefe en Afganistán, y Ray Odierno, al mando en Iraklarazon

El general Raymond Odierno respondió en estos términos a las estimaciones realizadas por los militares iraquíes, que no creen que sus propias tropas estén preparadas para mantener la seguridad en el país hasta el próximo 2020. El propio jefe del Estado Mayor iraquí, el general Babakar Zibari, reconoció que el Ejército no estaba preparado para asumir todas las misiones y que no estaría consolidado hasta dentro de diez años.
Preguntado por este comentario en la CNN, Odierno respondió textualmente: «Depende de qué tipo de presencia estemos hablando. Si el Gobierno iraquí nos pidiera algún tipo de asistencia técnica en el campo de batalla, sistemas que les permiten seguir protegiéndose, sobre amenazas externas, estaríamos allí». Y añadió que Estados Unidos tiene acuerdos similares con Arabia Saudí y Egipto para ayudarles a desarrollar su infraestructura y su estructura de seguridad. «Si es eso de lo que estamos hablando, entonces podríamos estar allí más allá de 2011», afirmó Odierno, provocando tal revuelo en Washington que ha obligado al al presidente Obama a anunciar una rueda de prensa específica sobre la retirada iraquí nada más volver de sus vacaciones.
Odierno, no obstante, cree que las fuerzas iraquíes estarán preparadas para cuando se produzca la retirada el año próximo. «Seguimos viendo avances en planificación y en su capacidad operativa. Vemos avances en desarrollo económico y desarrollo político. Todos estos aspectos, combinados, comenzarán a crear una atmósfera que mejorará la seguridad».
Aunque los hechos parecen desmentir su optimismo. Los atentados se suceden en Irak y, ayer mismo, murieron cuatro personas y dos docenas resultaron heridas en una sucesión de explosiones por todo el país.
El general norteamericano culpa de la situación a Irán por seguir obstaculizando el progreso iraquí. «Los iraníes siguen financiando y entrenando a grupos extremistas chiíes. Teherán no quiere ver que Irak vuelva a ser un país con una democracia fuerte, sino más bien una institución gubernamental débil para que no le suponga un problema en el futuro».