Repsol mantiene pese a la crisis sus objetivos de duplicar el tamaño de la compañía en 2012

Repsol confirmó ayer los objetivos de su Plan Estratégico 2008-20012, pese a las incertidumbres que genera el precio futuro del petróleo y la duración de la crisis económica. El plan prevé multiplicar por dos el resultado operativo y por 2,8 el beneficio neto dentro de tres años. La junta general de accionistas celebrada ayer acordó el reparto de un dividendo complementario con cargo a los beneficios de 2008 –2.711 millones de euros– de 0,525 euros el próximo 9 de julio, lo que elevará la retribución que perciben los accionistas hasta 1,05 euros por acción, un 5% más que en el ejercicio anterior. Sacyr, que tiene un 20% del capital de la petrolera, ingresará por este concepto 256 millones de euros y La Caixa, 183 millones.

El presidente de Repsol se mostró preocupado por la caída de la demanda de crudo a corto plazo (3,7% en el primer trimestre) y prevé que el precio del barril mantendrá una tendencia al alza en los próximos años. Brufau se sumó a la corriente de optimismo que se pasea por Europa y se refirió a la desaceleración que se ha producido en la caída de ventas de productos petrolíferos en el último mes. Para llevar adelante su plan, Repsol está incidiendo especialmente en el control de costes, que podría llegar a 500 millones de euros este año.

Hablando de la situación económica, Brufau pidió a políticos, empresarios y sindicatos más diálogo para convertir en oportunidad el actual problema de contar con 4 millones de parados. Repsol ha firmado con los sindicatos un acuerdo marco que garantiza la estabilidad en el empleo y aumentos salariales de IPC más 0,30 puntos este año y 0,7, el próximo.