En un incidente puntual aislado, la intervención de la policía del Capitolio de EE UU o incluso de la Policía Metropolitana de Washington hubiera sido más que suficiente para contenerlo sin mayor problema. Pero, ante la avalancha de cientos de manifestantes pro-Trump, enfurecidos y armados, las opciones de frenar este miércoles el asalto a la máxima institución legislativa fueron en vano.

En Estados Unidos, en casos excepcionales y de extrema necesidad, interviene la Guardia Nacional. Es habitual verles en desastres naturales como huracanes o tornados asistiendo en emergencias inmediatas, en protestas como las raciales por la muerte de George Floyd extendidas en 2020 por todo el país o en ataques terroristas.

Sin embargo, para poder actuar, necesitan recibir primero la orden de su máxima autoridad: el presidente de los Estados Unidos.

• Policía del Capitolio: 2.200 agentes

Eran la primera línea de defensa pero fueron incapaces de detener la turba. Su competencia se extiende a un área de aproximadamente 200 calles colindantes del Congreso de Estados Unidos. Con 192 años de existencia, la policía del Capitolio es la responsable de velar por la seguridad y tiene la función principal de proteger la vida y la propiedad; prevenir, detectar e investigar actos delictivos; y hacer cumplir las normas de tráfico en un gran complejo de edificios, parques y vías públicas en un área de aproximadamente 200 calles colindantes del Congreso de Estados Unidos.

• Policía Metropolitana: 4.520 efectivos

Fundado hace 159 años, se trata de la principal agencia de aplicación de la ley para el Distrito de Columbia. Está bajo un gobierno municipal pero opera con la autoridad federal. Cuenta con 3.800 oficiales y 600 funcionarios civiles. Es el sexto departamento de policía municipal más grande de EEUU y atiende a una población de más de 700.000 personas.

• Guardia Nacional: 467.580 soldados

Cada estado cuenta con su propia Guardia Nacional y es competencia directa del gobernador ordenar su despliegue. Tardaron por lo menos dos horas en ser movilizados. Tampoco se hizo uso del Ejército que ha intervenido otras veces. En tiempos de guerra o graves episodios de crisis nacional, es competencia única del presidente de EEUU poner bajo su control a una parte o a la totalidad de las tropas del país. No es de extrañar, por la misma razón, ver a agentes de la Guardia Nacional formar parte, de manera temporal, de guerras o conflictos en el extranjero.

• Servicio Secreto: 4.400 empleados

Su función principal es la prevención e investigación de la falsificación de dinero en EEUU, pero también es el cuerpo policial responsable de proteger al presidente, vicepresidente, presidente electo, vicepresidente electo, además de ex presidentes, familiares, ciertos candidatos a presidencia y vicepresidencia en el plazo de 120 días antes de la elección presidencial, hijos de presidentes anteriores menores de 16 años y jefes de estado extranjeros que visita el país.

• Fuerzas Armadas: 473.000 soldados

El Ejército interviene en conflictos por todo el mundo y es la mayor fuerza terrestre, ofensiva y defensiva, de Estados Unidos. Su principal responsabilidad son las operaciones militares terrestres, depende Departamento de Defensa y está dirigido por el Secretario del Ejército.

Tanto los seguidores de Trump como los agentes del Capitolio usaron sustancias químicas durante las horas que duró el asalto al Congreso, hasta que los efectivos policiales pudieron desalojar a los asaltantes. En los alrededores del lugar de ataque, las autoridades policiales encontraron dos bombas de tubo, una frente a la sede del Comité Nacional Demócrata y otra frente a la del Comité Nacional Republicano, así como un cóctel molotov y un refrigerador portátil con un arma larga.