Terrorismo

Cinco mujeres detenidas en Francia por un ataque inminente en Montpellier en Semana Santa

Los investigadores se centran en una joven de 18 años que se había “jactado” ante los vecinos de ver vídeos del Estado Islámico

Policías franceses en una foto de archivo
Policías franceses en una foto de archivoSALVATORE DI NOLFIAgencia EFE

Cinco mujeres fueron detenidas en la noche del sábado en la localidad francesa de Béziers, en el sur del país, en una operación antiterrorista lanzada ante la sospecha de un ataque inminente en la vecina Montpellier, indicaron este domingo los medios franceses. El semanario Le Point señaló en su edición digital que agentes de la Dirección General de la Seguridad Interior (DGSI) se incautaron de material que podría valer para fabricar explosivos, aunque una fuente cercana a la investigación señala que son productos en venta libre que también pueden servir para un uso doméstico.

Los investigadores, según la cadena BFM TV, buscaban a una chica de 18 años, que nunca ha sido condenada por terrorismo. La joven estaba con cuatro personas de su familia en el momento de la operación y todas fueron arrestadas. Ninguna de las cinco mujeres estaba fichada por la policía, aunque, según Le Point, una fuente local apunta que eran conocidas por haberse radicalizado. La Fiscalía Nacional Antiterrorista ha abierto una investigación preliminar por asociación terrorista.

Los investigadores se centraron en una mujer de 18 años que vive en un proyecto de viviendas en Béziers y se sospecha que está tramando un ataque contra la cercana Montpellier, según el alcalde Robert Menard. La madre del joven de 18 años y tres hermanas también fueron arrestadas, incluida una que es menor de edad, dijo.

La joven de 18 años se había “jactado” ante los vecinos de ver vídeos del Estado Islámico, dijo Menard a The Associated Press, aunque afirmó que no sabía si ella o su familia habían estado en el radar de las autoridades por radicalismo. Menard, quien fue alertado por la policía sobre la operación, dijo que habló con vecinos inquietos en el lugar. “Están horrorizados. Temen que se dé una mala imagen de este barrio y de la comunidad musulmana aquí“, dijo.