El expolicía Eric Adams gana las primarias de Nueva York y acaricia la alcaldía

El presidente del condado de Brooklyn, Eric Adams, ganó las primarias demócratas para alcalde de la ciudad de Nueva York después de apelar al centro político y prometer lograr el equilibrio adecuado entre la lucha contra el crimen y el fin de la injusticia racial en la policía. Adams, ex capitán de la policía, sería el segundo alcalde negro de la ciudad si fuera elegido.

Triunfó sobre un gran campo demócrata en la primera gran carrera de Nueva York para usar la votación por clasificación. Los resultados de las últimas tabulaciones publicadas el martes lo mostraron liderando a la ex comisionada de saneamiento de la ciudad Kathryn García por 8.426 votos, o un poco más de 1 punto porcentual. “Si bien aún quedan algunas cantidades muy pequeñas de votos por contar, los resultados son claros: una coalición histórica y diversa de cinco condados liderada por neoyorquinos de clase trabajadora nos ha llevado a la victoria en las primarias demócratas para la alcaldía de Nueva York “, dijo Adams en un comunicado.

Dijo que se postulaba para “cumplir la promesa de esta gran ciudad para aquellos que están luchando, que están desatendidos y que están comprometidos con un futuro seguro, justo y asequible para todos los neoyorquinos”. Adams será el favorito prohibitivo en las elecciones generales contra Curtis Sliwa, el fundador republicano de Guardian Angels. Los demócratas superan en número a los republicanos 7 a 1 en la ciudad de Nueva York.

Los rivales demócratas vencidos más cercanos de Adams incluyeron a García, quien hizo campaña como tecnócrata y resolvió problemas, y la exasesora legal del Ayuntamiento Maya Wiley, que tuvo un apoyo progresivo, incluido el respaldo de la representante federal Alexandria Ocasio-Cortez. Andrew Yang, el candidato presidencial de 2020 conocido por su propuesta de ingreso básico universal, fue uno de los primeros favoritos, pero se desvaneció en la carrera.

La votación en las primarias terminó el 22 de junio. Los primeros resultados mostraron a Adams a la cabeza, pero los neoyorquinos tuvieron que esperar a que se contaran decenas de miles de boletas ausentes y a que se hicieran rondas de tabulaciones bajo el nuevo sistema de elección por ranking. Según el sistema, los votantes clasificaron hasta cinco candidatos a alcalde en orden de preferencia.

Los candidatos con muy pocos votos para ganar fueron eliminados y las boletas emitidas para ellos se redistribuyeron entre los contendientes sobrevivientes, según la preferencia de los votantes, hasta que solo quedaron dos. La primera experiencia de la ciudad con el sistema en una elección importante fue accidentada. Mientras se contaban los votos el 29 de junio, los funcionarios electorales estropearon el recuento al incluir inadvertidamente 135.000 papeletas de prueba antiguas.

Los recuentos de votos erróneos se publicaron durante varias horas antes de que los funcionarios reconocieran el error y los retiraran. El error no tuvo ningún impacto en el resultado final de la carrera. Adams, García y Wiley presentaron demandas la semana pasada buscando el derecho a revisar el recuento de opciones clasificadas. Wiley dijo en un comunicado el martes que la junta “debe rehacerse por completo después de lo que solo puede describirse como una debacle”. En cuanto a ella misma, dijo que su campaña pronto tendría más que decir sobre los “próximos pasos”.

La campaña de García no emitió una respuesta inmediata al recuento de votos del martes, pero dijo que haría una declaración el miércoles por la mañana. Adams, de 60 años, es un demócrata moderado que se opuso al movimiento de “desfinanciar a la policía”. “No nos vamos a recuperar como ciudad si retrocedemos en el tiempo y vemos un aumento de la violencia, en particular la violencia con armas de fuego”, dijo Adams después de que tres personas, incluida una niña de 4 años, fueran baleadas y heridas en Times Square en mayo.

“Si las vidas de los negros realmente importan, no solo puede ser contra el abuso policial. Tiene que ser contra la violencia que está destrozando nuestras comunidades “, dijo a sus seguidores la noche de las primarias.

Pero Adams es un estudio en contradicciones que en diferentes momentos ha sido un defensor del líder de la Nación del Islam Louis Farrakhan, un republicano registrado y un senador estatal demócrata que prospera en un mundo de acuerdos secretos. Adams habla con frecuencia de su doble identidad como un veterano policial de 22 años y un hombre negro que sufrió la brutalidad policial él mismo cuando era adolescente.

Dijo que los agentes lo golpearon a los 15 años. Adams se convirtió en oficial de policía en 1984 y ascendió al rango de capitán antes de postularse para el Senado estatal en 2006. Mientras estaba en el departamento de policía, cofundó 100 Blacks in Law Enforcement Who Care, un grupo que hizo campaña a favor de la reforma de la justicia penal y en contra de los perfiles raciales.

Después de ganar un escaño en el Senado estatal de Brooklyn en 2006, Adams causó impresión con un apasionado discurso a favor de los derechos al matrimonio entre personas del mismo sexo en 2009, dos años antes de que los legisladores estatales de Nueva York aprobaran un proyecto de ley de igualdad en el matrimonio. Adams también resistió algunas controversias, incluido un informe de 2010 del inspector general del estado que criticó su supervisión del proceso de licitación para llevar el juego de casino al hipódromo Aqueduct Racetrack en Queens.

Adams había aceptado contribuciones de campaña de un grupo políticamente conectado que licitaba por la franquicia de juegos de azar. Adams fue elegido en 2013 como presidente del condado de Brooklyn, su trabajo actual. Adams es un vegano que le da crédito a una dieta basada en plantas para revertir su diabetes. Tiene un hijo de 25 años, Jordan Coleman, con una exnovia.

Su socio actual es Tracey Collins, una educadora que tiene un trabajo administrativo en el sistema de escuelas públicas de la ciudad. Los periodistas plantearon preguntas durante la carrera sobre dónde vivía Adams. Nació en Brooklyn, caminó allí como policía, es dueño de bienes raíces allí y lo representó en el Senado estatal. Pero durmió en su oficina en Brooklyn Borough Hall durante meses durante la pandemia y los opositores señalaron que comparte un lugar con su socio en Fort Lee, Nueva Jersey.

Adams dio a los periodistas un recorrido por un apartamento en el sótano en Brooklyn que, según dijo, era su residencia principal. Adams puede ser un orador carismático, pero también ha hecho declaraciones dignas de vergüenza, como su sugerencia de 1993 de que Herman Badillo, un político nacido en Puerto Rico, debería haberse casado con una latina en lugar de una mujer judía blanca. Hablando en un evento del Día de Martin Luther King Jr. el año pasado, Adams se quejó de que los gentrificadores se mudaban a la ciudad desde otros lugares.

“Vuelve a Iowa. Vuelve a Ohio “, dijo Adams. “La ciudad de Nueva York pertenece a la gente que estuvo aquí e hizo de la ciudad de Nueva York lo que es”. Al alcalde Bill de Blasio, un demócrata, se le prohibió por los estatutos de la ciudad buscar un tercer mandato. AP