El líder conservador sueco dispone de dos semana para formar Gobierno

Dos días después de que el “Riksdag” Parlamento sueco reanudara una nueva legislatura tras las elecciones del 11 de septiembre, el líder conservador y probable primer ministro, Ulf Kristersson, se reunió este miércoles con el presidente de la Cámara, Andreas Norlén, para solicitarle dos semanas para completar las negociaciones que mantiene con sus socios (democristianos, liberales y ultraderechistas).

Norlén, que repite en el cargo, le concedió ese tiempo a condición de que el líder del Partido Moderado le presente un informe provisional sobre el ritmo de las conversaciones dentro de una semana, el 5 de octubre. “La decisión tiene en cuenta tanto la importancia de que el proceso avance como el tiempo requerido para continuar las negociaciones en base a lo que ha explicado Ulf Kristersson”, explicó el presidente del Parlamento a la Prensa.

Si bien el líder conservador no quiso dar detalles de el punto en el que se encuentran las negociaciones, sí subrayó que avanzan por el buen camino. “En resumen, es una buena situación, hemos tenido discusiones constructivas”, explicó.

El bloque conservador logró en las elecciones una estrecha mayoría de 176 diputados frente a los 173 del bloque de izquierdas ahora en el Gobierno (socialdemócratas, verdes, ex comunistas y centristas). Pero suficiente para fraguar el primer Gobierno de derechas en ocho años y el primero sostenido por la derecha populista de los Demócratas Suecos (SD), si bien no está aún claro si formarán parte del Gobierno o le proporcionarán apoyo externo, dado que los liberales se muestran reacios a compartir el Consejo de Ministros con un partido de origen neonazi, que ha tratado de limpiar su imagen desde que irrumpió por primera vez en el Parlamento en 2010.

En caso de que dentro de dos semanas, el 12 de octubre, Kristersson pueda confirmar a Norlén que cuenta con los apoyos suficientes para gobernar, el presidente del Parlamento convocará una sesión de investidura en la que el candidato a primer ministro deberá contar para ser elegido con más votos favorables y abstenciones que ¡ en contra. Es decir, que no necesitaría alcanzar la mayoría absoluta de 175 votos. Mientras tanto, la socialdemócrata Magdalena Andersson permanece como primera ministra en funciones a las espera de que se forme un nuevo Gobierno. En 2018 hicieron falta 132 días, pero esta vez parece que el proceso serás más rápido gracias a la mayoría con la que cuenta el centro derecha en el Parlamento.