La fuerza militar de Pekín

El capitán del portaaviones chino Fujian: "Estamos listos para luchar y ganar en cualquier momento"

La armada china ultima las pruebas del barco para que pueda realizar su primera travesía a finales de este año

El portaaviones chino Fujian, tras su botadura cerca de Shanghai
El portaaviones chino Fujian, tras su botadura cerca de ShanghaiLa RazónLa Razón

El tercer portaaviones de China, el Fujian, ha entrado en su última etapa de preparativos para entrar en servicio con su primer travesía oficial programada para finales de este año. Para ello, le Ejército Popular de Liberación ha realizado con éxito las pruebas de amarre, según explica el diario pro chino The Global Times. El Fujian, el primer portaaviones chino con catapulta electromagnética y fabricado íntegramente dentro del país, desplaza 80.000 toneladas de peso y aspira a competir con las capacidades de los portaaviones de Estados Unidos en la región del Indo-Pacífico.

En una entrevista, Zhang Chuanqian, el capitán del barco, aseguró que "como marineros del primer portaaviones de China que está equipado con catapultas electromagnéticas y dispositivos de detención, nuestro objetivo es llegar al centenario de la fundación del Ejército Popular de Liberación de China, ya que estamos mejorando de manera integral nuestro entrenamiento y preparación para el combate, para que estamos listos en todo momento para luchar y ganar".

Analistas chinos consultados por el citado medio aseguran que también se han probado los sistemas de energía auxiliar, cuya función es proporcionar electricidad para algunos subsistemas. Probablemente sea parte de las pruebas de amarre del portaaviones, dijo Song Zhongping, un experto militar chino y comentarista de televisión. Las pruebas de amarre generalmente también incluyen la prueba de tuberías para líquidos y gases, dijo Song.

El Ejército chino botó el Fujian en junio del año pasado tras recibir la aprobación de la Comisión Militar Central, el órgano militar de mayor rango en el país. En la siguiente fase el Fujian ya podrá comenzar las pruebas en el mar, donde se analizará el comportamiento de los sistemas de propulsión, comunicaciones y navegación. El alto mando militar chino tiene como objetivo realizar pruebas y ensayos en el mar durante este año para que pueda entrar en servicio próximamente.

En diciembre de 2019, China botó en la provincia isleña de Hainan (sur) su segundo portaaviones, el Shandong, el primero de fabricación nacional, puesto que el único con el que contaba anteriormente la Armada del país asiático, el Liaoning, es un antiguo buque soviético que fue rehabilitado en 2012. El Liaoning está en un proceso de mantenimiento rutinario, mientras que el Shandong está listo para operaciones en alta mar después de obtener su certificado de entrenamiento de combate el año pasado.

La armada china está experimentando una modernización constante con la producción de nuevos destructores y submarinos desplegados en los últimos años en el Mar de China Meridional, donde Pekín rivaliza con Estados Unidos, que envía de forma regular buques de guerra para asegurar el libre tránsito por esta región marítima cuya soberanía China reclama en su totalidad, pese a que el Tribunal Permanente de Arbitraje de La Haya falló en 2016 en contra de Pekín en la disputa que este país mantiene con sus vecinos por las islas conocidas como Spratley o Paracelso (Nansha, en chino). El fallo judicial defendió que Pekín que tampoco puede alegar ningún interés económico exclusivo en sus aguas.

En Washington, la noticia de la botadura del Fujian generó cierto nerviosismo. Históricamente solo EEUU ha tenido una armada verdaderamente centrada en los portaaviones, una posición que se podría ver amenazada en un futuro cuando China llegue a desarrollar hasta seis portaaviones, según las estimaciones de observadores.

Actualmente, la potencia naval china ya es más numerosa que la estadounidense, según los cálculos del Pentágono. Sin embargo, los expertos consideran que hay factores más importantes que el número de barcos, como las tácticas, la experiencia, el entrenamiento y las tradición naval de un país. Como escribe el especialista Michael Pek, "si el tonelaje puro fuera el único criterio para una flota eficaz, la Royal Navy de Reino Unido nunca habría logrado el dominio marítimo durante siglos".