América Latina

EE UU y la UE reclaman a Maduro «elecciones libres»

Concluye sin acuerdo la cumbre de Petro sobre la crisis venezolana

El presidente de Colombia, Gustavo Petro, durante la conferencia internacional en Bogotá
El presidente de Colombia, Gustavo Petro, durante la conferencia internacional en BogotáFernando VergaraAgencia AP

La pelota vuelve a estar del lado de Nicolás Maduro: si quiere que las sanciones internacionales contra su Gobierno sean levantadas, debe tomar decisiones que conduzcan a democratizar Venezuela. La conferencia internacional sobre Venezuela que convocó el presidente colombiano, Gustavo Petro, en Bogotá este martes, no produjo una declaración conjunta ni una resolución. La reunión reunió a enviados de 19 países, además del alto representante de la Unión Europea (UE) para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Josep Borrell, y se extendió apenas por tres horas.

El resultado se quedó corto.

Las conclusiones fueron leídas en un brevísimo comunicado que leyó el ministro de Exteriores colombiano, Álvaro Leyva, en menos de dos minutos, después de los cuales no permitió preguntas a los periodistas presentes.

Según dijo Leyva, se identificaron «posiciones comunes» en las delegaciones en tono a tres cuestiones: la necesidad de establecer un calendario para la celebración de «elecciones libres y transparentes» para lo cual deben tomarse en cuenta las recomendaciones de la Misión de Observación Electoral (MOE) de la Unión Europea de 2021; así como el levantamiento de sanciones a Venezuela y la reactivación de la negociación política entre el régimen de Maduro y la oposición, que quedó congelada en México, acompañada «con la aceleración de la implementación del Fondo Social».

Nada nuevo. Las palabras del jefe de la diplomacia colombiana ni siquiera se soportaron en un documento firmado por todas las delegaciones presentes en la capital colombiana.

Con más peso sonaron las palabras de Borrell cuando afirmó que la Unión Europea «incluso» está dispuesta a revisar las sanciones personales contra altos cargos del régimen chavista si avanza «la normalización democrática» en Venezuela y hay «elecciones libres, transparentes e inclusivas».

El alto representante de la UE sostuvo que esta «revisión» se daría porque estas sanciones «no son eternas, no se hacen para que duren para siempre, se hacen para conseguir que el proceso de normalización democrática avance» en Venezuela.

En ese mismo sentido, Estados Unidos declaró que levantará gradualmente las sanciones a Venezuela si el país avanza hacia el restablecimiento de unas elecciones justas, según el viceconsejero de Seguridad Nacional estadounidense, Jon Finer, asistente a la cumbre de Bogotá.

«Estamos más que dispuestos a reducir y, en última instancia, poner fin a nuestras presiones de sanciones, pero se necesitarán pasos concretos y significativos y, en última instancia, elecciones libres y justas para llegar a eso», apuntó Finer tras el encuentro.

Leyva no dijo nada sobre la propuesta de Petro, expresada al inicio de la Cumbre de Bogotá, de orientar a Venezuela para que ingrese nuevamente al sistema interamericano de derechos humanos.

Horas más tarde, el régimen de Maduro publicó un comunicado informando que «toma nota» sobre los consensos alcanzados por la Conferencia de Bogotá, reiterando la «necesidad imperante» de levantar «todas y cada una» de las sanciones impuestas al país, la devolución de activos bloqueados en el extranjero y la liberación de Alex Saab, el contratista favorito del chavismo, preso actualmente en Estados Unidos por lavado de dinero y que Caracas defiende como «diplomático».

El escrito del Gobierno venezolano no mencionó la petición hecha por los países sobre la necesidad de un cronograma para elecciones libres y transparentes.

La oposición, agrupada en la Plataforma Unitaria, también comunicó su agradecimiento a las gestiones en Bogotá y celebró la conferencia saludando el consenso en torno a «retomar de manera urgente, sin excusas ni más dilaciones» la negociación en México. De igual forma, los opositores esperan que la cumbre pueda ayudar a impulsar temas como la liberación de los presos políticos y una hoja de ruta para celebrar unas elecciones democráticas.

El jefe de la delegación opositora que dialoga en México, Gerardo Blyde, cree que Nicolás Maduro «no le fue bien» en la conferencia internacional y que el consenso al que llegaron los diplomáticos participantes son afines a las peticiones que hicieron desde la Plataforma Unitaria antes de la cumbre.

El escándalo por la presunta expulsión de Colombia denunciada por Juan Guaidó desde Estados Unidos no marcó públicamente la reunión internacional sobre Venezuela del presidente Petro.