Conservadurismo

Elon Musk, invitado estrella en la convención conservadora de Meloni: «La inmigración no puede resolver la caída demográfica»

La primera ministra italiana aprovecha el foro en Roma para engrasar el eje antiinmigración con el «premier» británico Rishi Sunak

El magnate Elon Musk, dueño de Tesla o de la red social X, instó hoy a «tener hijos» para mantener la civilización y a defender un ambientalismo que no reste «esperanzas en el futuro», durante su participación en Roma en un foro invitado por la primera ministra italiana, Giogia Meloni. El multimillonario apareció ante el público en Roma con uno de sus hijos sobre sus hombros para lanzar su principal reivindicación: «Creo que es importante tener hijos para crear una nueva generación. Es tan simple como suena: si la gente no tiene hijos, no habrá una nueva generación», alertó, suscitando el aplauso de los asistentes.

Musk ha sido el invitado de honor de la presente edición de «Atreju», la convención que los ultraderechistas Hermanos de Italia, el partido de Meloni, organiza desde 1998 por deseo de ella misma, y que este año transcurre bajo el lema «Bienvenido orgullo italiano», pues la formación está en el poder desde octubre de 2022. «Mister X», como había sido anunciado misteriosamente por los organizadores del foro, expresó su preocupación por las tasas de natalidad en países como Italia y Francia y avisó de que «la inmigración no puede resolver la caída demográfica».

Precisamente abordó la cuestión migratoria, tan sensible en Italia y para la derecha en el Gobierno, y apostó por «aumentar» la inmigración legal e «interrumpir» los flujos ilegales porque esas personas que llegan, «honestas y que trabajan duro», deben ser integradas en «la parte productiva» de los países. «Mi consejo a todos los líderes de Gobierno y a las personas es que traten de tener hijos para crear una nueva generación», alegó ante el público, entre el que se encontraba Meloni, el líder del partido ultraderechista español Vox, Santiago Abascal, o el primer ministro socialdemócrata de Albania, Edi Rama. En este sentido, abogó por «apoyar un futuro sostenible que proteja al medioambiente» y, aunque se presentó «objetivamente como uno de los mayores ambientalistas», aseveró que esta batalla en ocasiones ha ido demasiado lejos.

«En las próximas décadas deberemos reducir miles de millones de toneladas de emisiones que lanzamos a la atmósfera, pero no creo que haya un riesgo para la civilización. No se destruirá la humanidad ni la vida sobre la Tierra, aunque si cambiamos el clima habrá algún problema en los siguientes decenios», vaticinó.

Entretanto, Musk opinó que el mundo «no debería prescindir del petróleo y de los combustibles fósiles porque son necesarios en el breve y medio plazo». «Harán falta décadas para convertirnos en sostenibles. Pero creo que no hay que estar tan preocupados. Tendremos una energía sostenible en el futuro, pero creo que algunos ambientalistas están haciendo que las personas pierdan la esperanza en el futuro», dijo. Y reivindicó: «Debemos tener esperanza en el futuro, estar emocionados ante el futuro y crear el que queramos».

Meloni y Sunak refuerzan en Roma su eje contra la inmigración irregular

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Italy PoliticsASSOCIATED PRESSAgencia AP

Meloni acogió también a su homólogo británico Rishi Sunak, que defendió la necesidad de reducir la inmigración irregular, compartiendo visión con su «amiga». «Con Giorgia mantengo una amistad muy sólida y fuerte que ahora se está consolidando. Somos atlantistas, conservadores, apoyamos a la OTAN y estamos en contra de la agresión rusa a Ucrania», proclamó Sunak desde el escenario.

Durante su intervención, el primer ministro británico, recibido por su homóloga con un abrazo, parafraseó a Margaret Thatcher al señalar que «las ideas solo son importantes si podían ponerse en marcha» y dijo que esa máxima «hoy debe aplicarse a la inmigración irregular». En este sentido, defendió su plan para llevar a Ruanda a los inmigrantes que entren de forma irregular a Reino Unido y aplaudió el acuerdo que Roma ha firmado con Albania para gestionar en su territorio dos centros de acogida, bloqueado temporalmente por el Tribunal Constitucional de ese país balcánico.

«Queremos interrumpir el modelo de negocio de las bandas criminales», dijo Sunak, en alusión a las mafias que se enriquecen con el tráfico de inmigrantes desde África a Europa. Y agregó: «Si para ello es necesario actualizar nuestras leyes y mantener conversaciones a nivel internacional para crear un marco sobre el asilo político, debemos hacerlo, porque si no gestionamos este problema hoy, las pateras seguirán llegando».

Antes de participar en «Atreju», Meloni recibió a Sunak en el romano Palacio Chigi, sede del Ejecutivo, y además de hablar de los principales temas de política internacional, como la crisis en Oriente Medio y la guerra en Ucrania, también trataron el tema de la inmigración. Ambos líderes decidieron «cofinanciar un primer proyecto italo-británico» para la repatriación voluntaria de personas «bloqueadas en Túnez» a sus países de origen con la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).

A la reunión se sumó después el primer ministro de Albania, Edi Rama, amigo también de Meloni y partidario del acuerdo con Italia para la construcción de los centros de acogida de inmigrantes. La primera ministra italiana, Sunak y Rama «han acordado intensificar aún más la colaboración entre sus tres países para combatir el tráfico de seres humanos», según un comunicado del Gobierno italiano.