Política

Internacional

Estados Unidos diseña un misil “ninja” equipado con cuchillas que no explota

El objetivo de este arma es intentar causar la menor cantidad de muertes civiles posible

Gráfico publicado por “The Wall Street Journal” del Hellfire
Gráfico publicado por “The Wall Street Journal” del Hellfirelarazon

El objetivo de este arma es intentar causar la menor cantidad de muertes civiles posible

El misil estadounidense Hellfire RX9, apodado “Ninja”, es una suerte de erizo sin púas, calvo, que tras detectar una amenaza saca su mecanismo de defensa muy rápido y logra defenderse. Además, la metáfora gana enteros porque, realmente, es algo así: el dispositivo es lanzado por un dron, vuela durante 8 kilómetros en busca de su objetivo y, cuando cae, lo hace a una velocidad de 1.600 km/h, algo que sumado a los 45 kilos que pesa el metal (¿metal?) causaría una gran explosión.

El tema es que no lo hace: justo antes de impactar, el sistema activa automáticamente seis cuchillasocultas de cerca de un metro de longitud que descuartiza al que ose andar cerca; no da opción a otra cosa tampoco.

El objetivo de Estados Unidos es minimizar la muerte de civiles, creando así una tecnología “menos dañina” y más efectiva contra la población de la mano de la compañía Lockheed Martin. En un reportaje elaborado por Wall Street Journal que contó con los testimonios de varios oficiales del Ejército, uno de ellos decía que el arma ya lleva tiempo utilizándose, pero que su existencia se ha mantenido oculta por parte del Pentágono y de la CIA.

El proyecto lleva tiempo en desarrollo: fue en el año 2011, con Barack Obama en el sillón de la Casa Blanca, cuando esta arma comenzó a cobrar vida; se ideó el utilizarla contra Osama bin Laden, pero el carácter prematuro del diseño impidió su empleo. El presidente no quería ocasionar más estragos en las zonas densamente pobladas y por ello se ideó un sistema más individualizado. Ha sido utilizado en seis ocasiones que se sepan en cinco países diferentes, estos son Irak, Siria, Libia, Yemen y Somalia; una ocasión fue en enero de 2019, cuando el gobierno norteamericano asesinó a Jamal Ahmad Mohammad Al Badawi, cerebro del atentado contra el USS Cole, dentro de su coche sin existir indicativos de explosión o ataque de fuego. Los asientos y el techo del vehículo estaban completamente destrozados.

Ni la CIA ni el Pentágono han confirmado o desmentido la existencia de este artefacto, lo que dilucida aún más si cabe su existencia. Aunque pueda sonar algo irónico, parece que ya se planean estrategias de guerra “más humanas” para matar a cuantos menos humanos inocentes, mejor.