Enfermedades

Las autoridades italianas investigan a un hostelero tras la tercera muerte por botulismo: "Dejaba los botes abiertos y al sol"

Un vendedor ambulante de Diamante almacenaba incorrectamente brócoli en conserva, mientras en Cagliari un guacamole industrial causó otra víctima, elevando a tres los fallecidos y a veinte los intoxicados en Italia

El puesto de venta de comida ambulante en el que, presuntamente, se originó el brote
El puesto de venta de comida ambulante en el que, presuntamente, se originó el broteComune di Diamante

La investigación judicial se centra ahora en "Peppino", dueño de un food truck en Diamante que reconocía ante el fiscal: "Dejaba los tarros de brocoli abiertos para atraer clientes y los refrigeraba por la noche". Esta negligente práctica habría causado la muerte de Tamara D'Acunto (45 años) y la intoxicación de doce personas, nueve en estado grave. Paralelamente, en Cagliari, Roberta Pitzalis (38 años) fallecía tras consumir guacamole contaminado en una fiesta.

Negligencia e ignorancia

Los análisis preliminares apuntan a que la toxina botulínica se desarrolló en los tarros de brocoli en conserva que permanecían expuestos al sol durante el día. El fiscal Domenico Fiordalisi investiga por homicidio involuntario al dueño del establecimiento, mientras también se examina la responsabilidad de los proveedores y de una clínica privada que rechazó atender a dos víctimas.

Entre los afectados más graves se encuentra un niño de 11 años trasladado urgentemente a Roma, y un adolescente de 16 años que permanece intubado. Las autoridades sanitarias han distribuido antídotos entre los intoxicados mientras continúan los análisis para determinar el origen exacto de la contaminación.

Este brote de botulismo, el más grave en Italia en la última década, ha llevado a la retirada inmediata de los productos sospechosos y ha abierto el debate sobre los controles sanitarios en pequeños establecimientos alimentarios.