Cargando...

Enseñanza

El país donde los ricos eligen la educación pública... pero tienen los peores datos de Europa

Uno de los indicadores del Informe PISA, de la OCDE, compara la segregación existente entre la enseñanza privada con el sistema estatal

En España y muchos países de Europa, se tiende a relacionar las personas ricas con la educación privada, aunque una nación de la OCDE tiene el efecto contrario, pese a sus resultados Dreamstime

En España, se tiende a relacionar a las familias más ricas con la educación privada, así como la pública con el resto. Algo que también surge en otros países del mundo, donde se equipara privatizar el sector educativo con un mayor poder adquisitivo. Pero hay un país en Europa que rompe esa "ley no escrita" y en el que los ricos se inclinan más por la educación pública, al elegir esta en lugar de la privada. Pese a ello, sus datos están entre los peores del continente: Portugal.

Portugal es el único país de la OCDE donde los estudiantes de la educación pública tienen un nivel socioeconómico superior a los alumnos de la privada. Y es que la concertada de nuestros vecinos acogen a los estudiantes de menor nivel adquisitivo, por mucha diferencia con respecto a la pública.

Todo lo contrario a España, territorio de la organización con la mayor diferencia socioeconómica entre los alumnos de la escuela privada y los de la pública, tal y como explica el Programa para la Evaluación Internacional de los Estudiantes, también conocido como informe PISA, el cual evalúa el rendimiento educativo de los estudiantes en diferentes países.

Por qué en Portugal los ricos eligen la educación pública: así son sus datos

Esto se debe al modelo portugués en educación, que se basa en invertir mucho dinero en la educación pública, de tal manera que apenas llega para la concertada, o lo que es lo mismo, el porcentaje para esta es muy limitado y se destina para centros educativos privados y cooperativos con contratos de asociación que aparecen en aquellas regiones del país luso donde la pública no está presente.

De este modo, la diferencia no radica en el hecho de pagar unas determinadas tasas, sino porque los centros privados acaban siendo creados en municipios pequeños y medianos o en zonas más desfavorecidas económicamente, mientras que en las grandes ciudades y lugares donde tienen lugar más estudiantes, se apuesta por la pública y prácticamente es la única opción.

Si bien actualmente hay 36 universidades privadas en Portugal y 14 públicas, las escuelas primarias públicas son las más numerosas, con más de 3.500. La educación privada, por su parte, reina más en escuelas prescolares en el país, aunque no llegan a mil. Según datos del Ministerio de Educación y Ciencia de Portugal, solo alrededor de 4% de los alumnos portugueses acuden a la privada.

Por ejemplo, está el caso de la Universidad de Lisboa, la más grande de Portugal, una de las más antiguas y con un amplia de programas de estudio en diversas áreas. Se trata de un centro público, y la mayoría de los universitarios que estudian en este país acuden a la capital lusa. Otra de las más importantes es la Universidad de Coímbra, también pública, mientras que la Universidad de Oporto es considerada la mejor del estado portugués, y también es pública.

Mientras, en el ámbito privado destaca la Universidad Católica portuguesa, con sede en distintas ciudades como Braga, Lisboa, Oporto o Viseu y que no deja de ser una alternativa para estudiar y obtener un título de alto nivel.

Informe PISA: los datos de los estudiantes de Europa

Según el informe PISA realizado en el mes de septiembre del 2024, con datos obtenidos a partir del perfil socioeconómico de los alumnos de 15 años de la escuela pública con los de la concertada y la diferencia entre unos y otros, en el caso de Portugal la diferencia es de 0,29 puntos a favor de la educación pública, mientras que en el ejemplo español, el cruce es de 0,48 puntos a favor de la privada.

En el informe se evalúan tres indicadores para obtener la puntuación, que se refiere al nivel educativo más alto de los padres, el estatus ocupacional más alto de los padres y las posesiones del hogar (o riqueza familiar).

Por otro lado, está el caso de Reino Unido y Países Bajos, donde la mayoría asisten a centros concertados y la diferencia socioeconómica entre estos y los estudiantes de la pública es entre mínima e inexistente (0 en Londres por 0,03 en Ámsterdam), mientras que en Turquía, Hungría o Corea del Sur, con menos de 0,1 puntos, la diferencia tampoco es notoria. Países como Estonia, Chile, Colombia o Australia, al igual que España, cuentan con una alta segregación a favor de la concertada.

Si bien es cierto que Portugal tiene, según publica la UNESCO, una tasa de alfabetización del 96,78% y sus resultados han ido mejorando notablemente en las últimas décadas, todavía cuenta con importantes desafíos. Y es que Portugal está entre los países más desiguales de la OCDE, según un informe de la organización recogido por BBC, que refleja que hay una gran proporción de adultos sin educación y niveles de desigualdad de ingresos por encima de la media.

Y culpa de ello, quizás, pueda ser que el 10% de los portugueses más ricos tiene un rendimiento muy superior al 10% más pobre. Así, se explica que más de la mitad de las personas entre 18 y 64 años no concluyó la enseñanza secundaria, lo que matiza que Portugal todavía se encuentra entre los países de la Europa con menor educación entre su población.