Oriente Medio

Irán devuelve el golpe a Israel con la ejecución de cuatro personas acusadas de espiar para el Mossad

Teherán responde a la muerte del comandante iraní Razi Mousavi en un ataque israelí en Damasco

Bandera de Irán28/12/2023
Irán ejecuta a cuatro "saboteadores" vinculados al Mossad israelíEuropa Press/Contacto/Rouzbeh FoEuropa Press

Irán ha devuelto el golpe a Israel con la ejecución de cuatro presuntos espías vinculados a su servicio de seguridad exterior, el Mossad. Es la respuesta de Teherán a la muerte el pasado lunes de Razi Mousavi, el comandante de la fuerza de élite Quds encargado de las relaciones militares con el régimen sirio de Bachar Al Assad. Mousavi, mano derecha del Qasem Soleimani –abatido hace casi cuatro años por un dron estadounidense en el aeropuerto de Bagdad– y segundo oficial de mayor rango en el escalafón de la Guardia Revolucionaria iraní, fue alcanzado en un ataque aéreo a las afueras de Damasco tras haber mantenido una breve reunión con el embajador persa en Siria. El ministro de Exteriores iraní, Hossein Amirabdollahian, atribuyó la autoría a Israel y prometió «una cuenta atrás» que se ha consumado en la mañana del viernes con el ahorcamiento de tres hombres y una mujer en la provincia de Azerbaiyán Occidental. Habían sido acusados de cooperar con el Mossad, según la agencia estatal de noticias Mizan.

Sus nombres son Vafa Hanareh, Aram Omari, Rahman Parhazo y Nasim Namazi. Formaban «un grupo de sabotaje relacionado con el régimen sionista», recoge el portal vinculado a la judicatura, motivo por el que fueron condenados a muerte por «librar una guerra contra Dios» y «corrupción en La Tierra». La República Islámica acusa a los cuatro de secuestrar a las fuerzas de seguridad iraníes con el objetivo de extraer información de inteligencia, además de incendiar los vehículos y apartamentos de algunos agentes.

Otras personas que formaban parte del operativo fueron condenadas a 10 años de cárcel cada una, según la información de Mizan, que no aporta más detalles sobre el caso. Otra agencia de noticias del régimen, IRNA, recoge que la inteligencia iraní sometió al grupo a vigilancia durante al menos cuatro meses, desde enero de 2022 hasta su detención el pasado mes de mayo, cuando fueron «trasladados desde un país vecino» a Irán.

Organizaciones en defensa de los derechos humanos como Amnistía Internacional vienen denunciando que Irán ejecuta cada año a más personas que ningún otro país. Solo China está por delante en el ranking. En lo que va de año, el régimen iraní ha ejecutado a más de 600 personas, la cifra más alta de los últimos ocho años, según el recuento del Grupo de Derechos Humanos de Irán, un organismo con sede en Noruega.

Es la segunda ejecución de presuntos espías vinculados al Mossad que tiene lugar en diciembre. Hace apenas dos semanas, otro hombre condenado por trabajar para los servicios de inteligencia israelíes fue ejecutado en la provincia de Sistán y Baluchistán. El último golpe reviste mayor gravedad tras la muerte del general Mousavi y la vertiginosa escalada de las tensiones en la región en mitad de la guerra de Israel en Gaza. Pero el intercambio de hostilidades viene siendo habitual entre dos países que libran desde hace años una guerra en la sombra. En agosto, Irán acusó a Israel de estar detrás de «uno de los mayores complots de sabotaje» contra su industria de defensa y la producción de misiles. Meses atrás denunciaba la campaña sistemática de atentados contra los líderes científicos y militares que dirigen su programa nuclear. Israel, por su parte, acusa a Irán de haber tejido una red de fuerzas que buscan la destrucción del Estado judío: Hamás y la Yihad Islámica en Gaza, Hizbulá en Líbano, los hutíes en Yemen, el régimen de Al Assad y una miríada de milicias chiíes en Irak. El llamado «Eje de la Resistencia».

Eso explica las recientes declaraciones del ministro de Defensa Yoav Gallant, en una comisión de la Knesset, en la que reconoció que Israel estaba siendo atacado en una «guerra multiarena» en siete frentes distintos. «Ya hemos respondido y actuado en seis de estas arenas y lo digo aquí de la manera más explícita: cualquiera que actúe contra nosotros es un objetivo potencial, no hay inmunidad para nadie», subrayó. Deslizó que solo falta atacar en suelo iraní.

El ex primer ministro israelí Naftali Bennett dio el jueves una muestra más de la aversión que se profesa hacia Irán en una columna de opinión publicada en las páginas del Wall Street Journal. Con el título «Estados Unidos e Israel deben enfrentarse directamente a Irán», el que fuera soldado de operaciones especiales de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) antes de hacerse de oro en el sector de la ciberseguridad defiende un ataque directo contra los intereses iraníes y reconoce haber ordenado al menos un ataque contra un alto mando de la Guardia Revolucionaria a principios de 2022.