Las FARC se retiran de la carrera presidencial

La ex guerrilla se ha topado con el rechazo de los colombianos más conservadores a su entrada en política.

El líder del partido político surgido de la extinta guerrilla de las FARC, Rodrigo Londoño Echeverri, alias «Timochenko» no será candidato a las elecciones presidenciales que se celebrarán el 27 de mayo en Colombia, debido a sus problemas de salud. Pese a las rumores sobre su relevo, finalmente nadie reemplazará a «Timochenko» en su aspiración presidencial. Ahora falta por ver a qué fuerza apoyarán las FARC en las urnas. Podrían respaldar a Gustavo Francisco Petro, del Movimiento Progresistas. Más allá de las cuestiones de salud, este cambio de estrategia a última hora sería debido a los malos resultados que reflejan las encuestas. «Timochenko» fue el más votado en la consulta interna que hicieron las FARC para decidir a quién lanzarían a la carrera por la Casa de Nariño –aunque muchos dudaron que esas primarias internas fueran justas–.

Tras la muerte de «Alfonso Cano» en 2011, «Timochenko» se convirtió en el máximo jefe de la guerrilla y, como tal, la ha guiado en el proceso de paz que culminó en 2016 con un acuerdo. Al parecer, la semana pasada sufrió un «dolor torácico» durante un mitin celebrado en la localidad de Fusagasugá. Desde entonces permanece ingresado en la Clínica Shaio de Bogotá. El parte médico señala además una dolencia cardíaca por la que fue operado el miércoles, una enfermedad pulmonar y una obstrucción de una arteria cerebral. Horas antes de la intervención quirúrgica, «Timochenko» difundió un video por Twitter en el que confiaba en «salir adelante». No se descarta que se traslade a «Timochenko» a La Habana, donde ha residido en los últimos años.

Las elecciones legislativas y presidenciales eran las primeras en las que podrán participar las FARC como partido. Pese a renunciar a la presidencia, sí participarán en las parlamentarias de este domingo. Para las presidenciales los sondeos situaban a ‘Timochenko» en el último puesto del ranking, por lo que la verdadera batalla electoral de la ex guerrilla se librará el 11 de marzo, cuando los colombianos elijan a sus diputados. En cualquier caso los acuerdos de paz otorgan un premio de diez escaños a las FARC por su entrada en la política. Según las encuestas, no sacarán ni un escaño por votación directa. La campaña, además, no estaba siendo un plato fácil para «Timochenko». En un acto en Cali le lanzaron huevos, gritaron improperios y llamaron «asesino». Una escena similar ya había ocurrido en Armenia, una ciudad a 280 kilómetros de Bogotá, donde el vehículo en el que se transportaba el ex jefe de la guerrilla de la FARC fue agredido con piedras y golpes. Incluso la agrupación llegó a suspender durante semanas la campaña.

La transición política no ha sido fácil para las FARC y el candidato del uribismo, Iván Duque, está a la cabeza. Hay quien se pregunta si con Duque el proceso de paz será irreversible.