Europa

La UE, Reino Unido y los Balcanes se conjuran para combatir la "guerra híbrida" de Putin

Londres destinará 4 millones de libras (4,6 millones de euros) para reforzar las "defensas cibernéticas" de los Balcanes occidentales ante la "constante" interferencia de Rusia en la región

British Foreign Secretary Yvette Cooper, front center, poses for a group photograph with other Foreign ministers as she hosts the Western Balkans Summit Foreign Ministers Meeting in Belfast, Northern Ireland, Thursday, Oct. 9, 2025. (Charles McQuillan/Pool Photo via AP)
Cumbre de la UE, los Balcanes y Gran BretañaASSOCIATED PRESSAgencia AP

El Reino Unido, la Unión Europea (UE) y los Balcanes occidentales mostraron este jueves un frente de unidad ante las "amenazas híbridas" que plantea Rusia en el continente para debilitar a sus democracias, tras participar en una cumbre del llamado Proceso de Berlín.

La ministra británica de Asuntos Exteriores, Yvette Cooper, presidió hoy en Belfast (Irlanda del Norte) esta reunión con colegas comunitarios y homólogos de las seis naciones de los Balcanes occidentales (Albania, Bosnia y Herzegovina, Macedonia del Norte, Montenegro, Serbia y Kosovo).

"Sabemos que la seguridad de los Balcanes occidentales afecta a la seguridad de toda Europa y a la nuestra aquí en el Reino Unido", expuso Cooper antes de un encuentro que abordó la seguridad regional, la lucha contra la inmigración irregular y la cooperación económica y política.

A este respecto, Londres anunció que destinará 4 millones de libras (4,6 millones de euros) para reforzar las "defensas cibernéticas" de los Balcanes occidentales ante la "constante" interferencia de Rusia en la región.

"Creo que todos reconocemos que estas amenazas híbridas son muy, muy reales para nuestras sociedades", aseguró a EFE el secretario de Estado británico para Europa, Stephen Daughty.

La intimidación de Moscú, advirtió, pone en peligro el "tejido mismo de nuestras democracias", ya sea a través de guerra cibernética, de desinformación o por medio de otras "actividades rusas malignas en todo el continente europeo".

A su juicio, este encuentro con colegas de la UE y de los Balcanes occidentales ha evidenciado que existe un "alto grado de unidad" respecto a la necesidad de "reforzar la resiliencia de nuestros países".

Daughty avanzó que se han analizado "varias iniciativas conjuntas" encaminadas a hacer frente "a algunas de esas amenazas", las cuales se abordarán en más detalle en otra reunión del Proceso de Berlín que se celebrará en Londres el próximo 22 de octubre y al que asistirán los líderes de los países que lo integran.

"Todos hemos experimentado esas amenazas de diferentes maneras. Estamos muy alerta y debemos fortalecer las capacidades de nuestros Gobiernos, de nuestras sociedades para hacerlas frente", señaló el dirigente británico.

La adhesión de los Balcanes a la UE

Daughty también hizo referencia a la posible entrada de los países de los Balcanes occidentales en la UE, después de que el ministro alemán de Exteriores, Johann Wadephul, les pidiera que no pierdan la confianza en su adhesión, en vista de un entorno geopolítico marcado por el mayor papel de China y Rusia.

El jefe de la diplomacia alemana recordó en la víspera de esta cumbre que el "catalizador" de la vía de adhesión a la UE es, de hecho, el Proceso de Berlín.

Esta cuestión, recordó hoy Daughty, solo atañe a la UE y a cada uno de los países solicitantes, si bien subrayó que el Gobierno británico apoya un "camino 'Euroatlántico' para los miembros de los Balcanes occidentales".

"Nuestros objetivos son complementarios pero, obviamente, nuestros destinos podrían ser diferentes", indicó el secretario de Estado al referirse a la salida del Reino Unido del bloque comunitario.

Daughty confirmó asimismo que los participantes han acordado aunar esfuerzos para abordar el tráfico de migrantes, mientras que Londres invertirá 10 millones de libras (11,5 millones de euros) para desarrollar programas de lucha contra la migración ilegal.

El Ejecutivo británico entiende que la lucha contra el tráfico de personas tendrá un impacto directo en las cadenas de suministro y las ganancias de las redes de delincuencia organizada de inmigración, al tiempo que reducirá la amenaza que representan para el Reino Unido.

El Gobierno ha explicado que parte de esa inversión financiará nuevos proyectos en la región relacionados, por ejemplo, con la formación de las fuerzas del orden en Kosovo, la seguridad fronteriza y la ayuda a las posibles víctimas de la trata de personas en Serbia.