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Bodas 2025

Los tratamientos que sí merece la pena hacerse antes de tu boda (palabra de experta)

Aquí encontrás la guía perfecta para deslumbrar de cara a tu gran día

Influencer con piel bonita el día de su boda. @dominiquelissa

Nadie te lo dice, pero entre elegir flores, encajar invitados y probar menús, la cuenta atrás hacia el altar puede convertirse en una prueba de resistencia emocional. Por eso, más allá del vestido, los zapatos o el peinado perfecto, cada vez más novias entienden que sentirse bien también es parte del gran día. Y que empezar a cuidarse con antelación, lejos de ser un lujo, es casi un acto de autocuidado necesario.

Frente a este nuevo enfoque más consciente, los tratamientos de belleza han dejado de ser un simple extra para convertirse en una herramienta para llegar al 'sí, quiero' con buena cara, piel descansada y la mente en calma. Pero, ¿por dónde empezar? ¿Cuánto tiempo antes hay que hacerlo? ¿Y cuáles merecen realmente la pena?

¿Cuándo y cómo empezar a preparar tu piel para la boda?

'No hay una única respuesta correcta', nos explican desde AWAY Spa, en el recién inaugurado Hotel W de Barcelona. 'Todo depende del estado actual de la piel y los objetivos finales. Si se trata de un tratamiento profundo, como mejorar una rosácea o tratar marcas, lo ideal sería empezar de 6 a 12 meses antes, con el apoyo de un dermatólogo. Pero si lo que buscas es llegar con la piel más luminosa y equilibrada, bastan entre 3 y 6 meses para trabajar de forma gradual con tratamientos hidratantes, glow o de limpieza profunda'.

La clave, nos recuerdan, está en la constancia. Y también en entender que la piel no es una categoría cerrada (seca, grasa o mixta), sino un órgano cambiante que puede tener diferentes necesidades según el momento. De ahí que una rutina eficaz deba ser flexible y capaz de adaptarse al estrés, las hormonas o el clima. 'A medida que se acerca el gran día, lo importante es mantener. En el último mes, ya no se trata de innovar ni de introducir tratamientos nuevos, sino de reforzar lo que funciona: hidratación, mascarillas calmantes con ácido hialurónico y mucha nutrición desde dentro. Nada de alcohol, dormir bien y mimarse. Eso se nota en la piel más que cualquier sérum milagroso', añaden.

Los tratamientos que sí funcionan (y los que no necesitas)

En un mercado saturado de promesas instantáneas, no todo vale. Por eso es importante distinguir entre lo que realmente ayuda a que la piel llegue radiante al altar y lo que puede esperar para otro momento. Desde Selvarrosa, en Madrid, salón especializado en planes de belleza personalizados para novias, apuestan por un enfoque progresivo y realista. Su propuesta comienza varios meses antes con una entrevista personal para conocer a fondo el estilo de vida, tipo de piel y objetivos de cada novia. A partir de ahí, se diseña un calendario con tratamientos faciales como:

  • Limpieza facial personalizada, imprescindible para preparar el terreno y facilitar la absorción del resto de activos.
  • Hydra Glow, con ácido hialurónico, ideal para pieles deshidratadas que buscan ese efecto buena cara sin maquillaje.
  • Remodelante facial, que combina técnicas manuales para tonificar, reafirmar y redefinir el óvalo facial sin agujas.
  • Vitamina C profesional, una apuesta segura para iluminar, estimular el colágeno y aportar elasticidad.

Y aunque todo esto suene muy individual, la tendencia ahora también se comparte. 'Cada vez más parejas vienen juntas a hacerse un tratamiento o reservar una sesión de spa', confirman desde AWAY Spa. 'El autocuidado ya no es solo cosa de mujeres. Los novios también quieren verse bien en las fotos, estar relajados y vivir ese proceso como un ritual compartido'.

Puede que el mejor secreto de belleza preboda esté al fin y al cabo en la manera en que vives los meses previos. 'Una piel bonita no es solo resultado de una buena rutina, sino del equilibrio general. Cómo te alimentas, cómo duermes, cómo respiras', explican las expertas. Evitar el azúcar y el alcohol, priorizar los alimentos ricos en antioxidantes, moverse, meditar, hablar con alguien si lo necesitas… Porque al final, lo más importante no es parecer perfecta, sino sentirte bien contigo misma. Y eso, piel incluida, se empieza a trabajar mucho antes del gran día.