Cataluña

Garzón: Boda versus manifestación

El líder de IU dió ayer el «sí quiero» a su novia, Anna Ruiz, en la localidad riojana de Cenicero, aunque su corazón estaba también en Barcelona, pese a lo que fue criticado en las redes sociales por el cubierto a 300 euros para sus más de 200 invitados

Alberto Garzón y su novia, Anna Ruiz, tras darse el "sí quiero"ante unos 205 invitados
Alberto Garzón y su novia, Anna Ruiz, tras darse el "sí quiero"ante unos 205 invitadoslarazon

El líder de IU dió ayer el «sí quiero» a su novia, Anna Ruiz, en la localidad riojana de Cenicero, aunque su corazón estaba también en Barcelona, pese a lo que fue criticado en las redes sociales por el cubierto a 300 euros para sus más de 200 invitados.

Lo que le enamoró a Alberto Garzón (31 años) de Anna Ruiz (27) cuando la conoció hace cuatro durante un mitin que ofreció el líder de Izquierda Unida en Ronda (Málaga), la tierra natal de ella, fue su sensibilidad social. De la que también hizo gala ayer el político, por lo que poco antes de pasar por el altar tenía un recuerdo para la manifestación contra los atentados yihadistas que tenía lugar unas horas más tarde: «Hoy es un día muy especial para mí, pero mi corazón también estará esta tarde en Barcelona. #NoTincPor», escribía en Twitter. Tras la boda, Garzón se convirtió en «trending topic» por las voces discordantes que recriminaban al «comunista, anticapitalista y populista contraer matrimonio en una bodega riojana a 300 euros el cubierto» en una ceremonia con 200 invitados. «A Alberto Garzón le recuerdo uno de los mandamientos del comunismo: ni dinero, ni ostentación», fue uno de los reproches en el debate que se levantó en las redes. «Tiene derecho a gastarse lo que a él le apetezca de SU dinero en SU boda», alegaba el bando contrario.

Pese al boato o no del enlace, la ceremonia estuvo en parte marcada por la manifestación, ya que algunos de los invitados, como Pablo Iglesias e Irene Montero, tuvieron casi que ejercer el don de la ubicuidad para estar presentes en ambos eventos. De hecho, el líder de Podemos y su novia y compañera de partido llegaron antes que los autobuses que trasladaban al resto de amigos y familiares, y entraron por una puerta lateral de las instalaciones de Bodegas Riojanas, donde se celebró la ceremonia íntima que ofició el magistrado y ex presidente del Tribunal Superior de Justicia de La Rioja Ignacio Espinosa, tío del político. Es más, Iglesias fue de los primeros en irse en un coche blanco que le trasladó a Barcelona. Entre los invitados se encontraban también conocidos miembros de IU, como Julio Anguita, quien por Twitter dio su «enhorabuena a esta pareja de luchadores», el coordinador de IU, Antonio Maíllo, y los actores Sergio Peris-Mencheta y Gorka Otxoa. Los compromisos profesionales impidieron asistir a Juan Diego Botto e Ismael Serrano.

chaqué corto

El novio, que vestía un traje tipo chaqué corto, con chaqueta azul oscuro a juego con la corbata y pantalón gris como el chaleco, esperaba a Anna en lo alto de las escaleras de las bodegas y cuando llegó se fundieron en abrazos y tímidos besos, mientras docenas de personas de la localidad, en la que él pasó su infancia, les gritaban «¡guapos!» . La novia lucía un sencillo vestido blanco con bordados que en la espalda se hacían transparentes y un tocado de flores en el pelo de las que pendía un largo velo. Un traje de corte romántico, al que unas sandalias rojas pusieron el contrapunto.

Una vez casados, la pareja se desplazó a la cercana localidad de Laguardia (Álava), para disfrutar del banquete en el restaurante La huerta vieja, a pocos kilómetros, pese a cambiar de provincia, de Cenicero, donde Alberto Garzón ha querido casarse porque además es donde está enterrada su madre, quien falleció hace tres años.