Bodas

Por fin descubrimos el vestido de novia más glamuroso de Garbiñe Muguruza inspirado en Marilyn Monroe

Dos diseños de la firma Pronovias inspirados en la era dorada de Hollywood.

 Garbiñe Muguruza y Arthur Borges.
Garbiñe Muguruza y Arthur Borges.Gtres

No hay nada que nos guste más que una boda, sobre todo por los vestidos de la novia y de las invitadas, y este miércoles por fin hemos podido ver el vestido de novia de Garbiñe Muguruza en ¡Hola! con todo su esplendor. La historia de amor de Garbiñe Muguruza y Arthur Borges fue fruto del destino. La tenista paseaba por Central Park, tratando de desconectar de su preparación para el US Open, cuando se encontró con él. La reconoció y le deseó suerte para el campeonato. De aquel flechazo han pasado ya tres años y este sábado, 5 de octubre, celebraronsu boda en España. Tras una ceremonia íntima en Ginebra, donde ambos tienen fijada su residencia, Garbiñe y Arthur se dieron el 'sí quiero' en la finca La Concepción de Marbella con dos vestidos de Atelier Pronovias.

Unos vestidos que según cuenta Garbiñe Muguruza en ¡Hola! tenía muy claro cual era su inspiración: "Me he inspirado en la era dorada de Hollywood, en aquellos vestidos de Marilyn Monroe, de Elizabeth Taylor, que son elegantes y bonitos y hacen buena figura". El primer vestido de lo más glamuroso de Atelier Pronovias con escote asimétrico y con cuello perfilado en rocaille de cristal, estaba confeccionado en Mikado, y la voluminosa falda, con drapeado en la cintura, evolucionaba en una cola de dos metros. Se complementaba con una glamurosa gran lazada en el hombro y una rejilla como tocado. Sin duda, una novia de lo más original y glamurosa.

Los dos vestidos de novia de Garbiñe Muguruza

Si con el primer vestido de novia nos ha sorprendido, con el segundo mucho más. Inspirado en el Gran Gatsby como explica en ¡Hola! este miércoles. Un segundo vestido también de Atelier Pronovias con escote palabra de honor y abertura frontal, con flecos de cristal de rocaille a lo largo de la falda, en encaje bordado y con una gran flor bordada en el hombro y pequeñas flores de cristal. ¡Qué fantasía!