Leonor debuta en Marivent por todo lo alto vestida de su madre con diseño de Desigual de 2023 (y alpargatas muy altas)

La Princesa Leonor ha protagonizado este verano una de las estampas más comentadas de la temporada mallorquina. Por primera vez, la heredera al trono ha asistido, junto a su hermana la Infanta Sofía, a la tradicional recepción que los Reyes ofrecen cada año en el Palacio de Marivent a una representación de la sociedad balear. Un encuentro muy simbólico que este 2025 ha contado con una potente carga estilística: Leonor ha rescatado el icónico vestido de Desigual que su madre, la Reina Letizia, lució en el mismo acto el verano anterior.

El debut más esperado (y estiloso) del verano

A las 21:00 horas, en un atardecer idílico en los jardines del palacio, los Reyes aparecían en escena acompañados de sus hijas y de doña Sofía. Esta ha sido la primera vez que Leonor y Sofía participan en este tipo de actos durante su estancia estival en Mallorca, algo que marca un antes y un después en su agenda institucional y también en su estilo.

Sonriente, cercana y visiblemente cómoda, la Princesa Leonor apostó por un look lleno de significado: un vestido largo de escote bardot, con fondo blanco y un vistoso estampado azul inspirado en el Toile de Jouy, perteneciente a la colección cápsula de Stella Jean para Desigual. Un diseño con guiño mediterráneo y esencia balear que ya conquistó el año pasado a su madre.

El vestido que la Reina Letizia lució para este recepción en 2023

El modelo, que Letizia estrenó en 2023 en esta misma recepción, marcó un antes y un después en sus elecciones de moda veraniega. Por primera vez, la Reina apostaba por la firma Desigual en un acto oficial, reivindicando el talento creativo nacional y celebrando la conexión entre la moda y el arte. Esta elección se interpretó también como un homenaje a las Islas Baleares y a sus tradiciones, dada la inspiración ibicenca del escote bardot y el vuelo del vestido.

Un año después, Leonor recupera esta prenda para su primer Marivent, elevándola a símbolo de continuidad, sostenibilidad y complicidad madre-hija. En su caso, la princesa lo combinó con unas alpargatas de cuña beige atadas al tobillo, en un estilismo que equilibra juventud y elegancia con total naturalidad.

La moda como lenguaje generacional (y guiño a su madre)

Con este gesto, Leonor no solo sigue la estela de su madre en cuanto a representación institucional, sino que también adopta su código de estilo: sobrio, simbólico y con mensaje. En una era en la que la sostenibilidad se convierte en valor clave, el hecho de reutilizar una prenda con tanto peso visual y emocional refuerza su figura como royal consciente y cercana.

Además, su hermana, la Infanta Sofía, también brilló con un vestido de corte recto con estampado tipo tie-dye de Zara en tonos rosas, mientras que doña Letizia optó por otro vestido blanco de aire ibicenco, dejando que fueran sus hijas quienes acapararan el foco estilístico. Leonor ha dejado claro que ha llegado el momento de empezar a escribir su propia narrativa dentro de la Familia Real, y lo ha hecho de la mejor forma posible: con estilo, elegancia y un mensaje claro de continuidad.