Corrupción política

Una tarjeta «black» de la Junta se utilizó en un club de alterne de Sevilla

Una trabajadora de la empresa investigada admite el pago de comidas y reparación de vehículos.

El presidente del Partido Popular en Andalucía, Juanma Moreno. EFE/Daniel Pérez
El presidente del Partido Popular en Andalucía, Juanma Moreno. EFE/Daniel Pérezlarazon

Una trabajadora de la empresa investigada admite el pago de comidas y reparación de vehículos.

La extinta Fundación Andaluz Fondo de Formación y Empleo (Faffe), un ente público de la Junta que dependía de la Consejería de Empleo, contaba con un total de 13 cajas en sus distintas sedes y una tarjeta «black» –de representación, según la Junta– con un límite de 3.000 euros mensuales a disposición del director general. Con este medio de pago se abonaron varios servicios que, en principio, nada tenían que ver con la actividad de esta fundación. Entre otros, la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil investiga su uso en un club de alterne de Sevilla, según denunció ayer públicamente el PP andaluz.

La Fundación Pública Andaluza de Formación y Empleo (Faffe) es objeto de una investigación judicial dentro del macroproceso de los cursos de formación. Es en este contexto donde los investigadores recopilan información sobre el destino final de los fondos públicos y han descubierto la existencia de al menos una tarjeta de crédito a disposición del entonces director gerente motivo por el que han solicitado todos los movimientos vinculados a ella.

En este sentido, el 5 de noviembre de 2015 –la Faffe fue extinguida en 2011 y su personal, salvo los directivos, integrado en el Servicio Andaluz de Empleo–, la Guardia Civil tomó declaración en calidad de testigo al propietario de un «bar de ocio para adultos (club de alterne)» al que interrogaron sobre la utilización de los terminales electrónicos para el pago de los servicios ofertados. La declaración estaba enmarcada dentro de las diligencias previas que se siguen sobre la Faffe.

Los agentes han seguido investigando el destino final de los fondos públicos de este organismo y el 17 de marzo de 2016 tomaron declaración a una técnico de la dirección económico financiera de la Faffe que aportó más datos sobre el funcionamiento de este ente. En concreto, admitió la existencia de una tarjeta de crédito «que únicamente era utilizada por Fernando Villén y que tenía un límite de 3.000 euros al mes para gastos de representación única y exclusivamente». Según consta en el acta de su declaración, consultada por este periódico, «en esta tarjeta principalmente se cargaron gastos de comidas en restaurantes, alojamiento y cree que, en alguna ocasión, reparación de vehículos».

Los agentes también le cuestionaron sobre si tuvo constancia de alguna «anulación de gasto» en la cuenta asociada a la tarjeta de crédito utilizada por Villén. Apuntó que «no tenía constancia» pero sí tenía «conocimiento de que en dos o tres ocasiones Fernando Villén ha utilizado por equivocación esta tarjeta, devolviéndolo íntegramente a continuación. Recuerda que eran importes considerables, superiores a 500 euros».

Fernando Villén fue el máximo responsable de la Faffe desde su creación en el año 2003 hasta su extinción en 2011. También fue secretario de Empleo de la Ejecutiva regional del PSOE andaluz.

Por su parte, el portavoz del Gobierno andaluz, Juan Carlos Blanco, aseguró que en la Faffe sólo había «una tarjeta de crédito que tenía un directivo», que tuvo un gasto de 44 euros de media al mes durante 2008, 2009 y 2010. El consejero de Empleo, Javier Carnero, aseguró más tarde que el gasto total ascendió a 1.563 euros y que había otras tarjetas «sólo para gasolina».