Andalucía

La Junta quiere acabar con la «maraña» del sector público a partir de 2020

Bendodo asegura que «no hará falta tener el carnet del PSOE» para trabajar en la Administración

El consejero de Presidencia, Elías Bendodo, ayer en la comisión parlamentaria / Foto: La Razón
El consejero de Presidencia, Elías Bendodo, ayer en la comisión parlamentaria / Foto: La Razónlarazon

Bendodo asegura que «no hará falta tener el carnet del PSOE» para trabajar en la Administración

«Nos hemos encontrado con un sector instrumental que se concibió como una maraña para consolidar el régimen, al que muchas personas accedieron por tener el carnet del PSOE». En estos términos se expresó ayer el consejero de Presidencia, Elías Bendodo, en comisión parlamentaria, donde explicó, a petición de los socialistas, la situación laboral de los integrantes del sector público andaluz. Un galimatías de agencias públicas empresariales, fundaciones, consorcios y sociedades mercantiles en los que la Junta quiere poner orden a partir de 2020. De hecho, Bendodo anunció que el grupo de trabajo encargado de evaluar las entidades instrumentales, dependiente de la Consejería de Turismo, Regeneración, Justicia y Administración Local, tendrá un primer paquete de medidas antes de que acabe el año.

Este grupo, según apuntó Bendodo, ha celebrado ya cuatro reuniones, en las que se ha recopilado «numerosa información». Los trabajos se centran en analizar aspectos como la organización, régimen de personal, actividad efectiva realizada, funcionamiento real, coste económico, financiación, cumplimiento de obligaciones fiscales, régimen presupuestario, ámbito económico-financiero, contabilidad y rentabilidad social.

El consejero recordó que el sector lo componen 12 agencias administrativas, 18 agencias públicas empresariales, tres agencias de régimen especial, 16 sociedades mercantiles, 17 fundaciones y 12 consorcios. En relación a la información recopilada hasta el momento, el consejero enumeró algunos aspectos que consideró «mejorables», como la existencia de 31 sistemas de gestión de recursos humanos diferentes, 11 de ellos externalizados, además de 38 sistemas económicos-financieros distintos y plantillas estancas con problemas de dimensionamiento en la mayoría de las entidades. Junto a ello, alertó de que hay pagos de seguros de vida y de salud, reconocidos en los convenios, y que el personal funcionario no goza de estas coberturas, con el consiguiente «agravio comparativo».

El objetivo de la Junta, en definitiva, es que la Administración autonómica «funcione mejor», que los recursos públicos «se utilicen adecuadamente» y que el empleo público se rija por los principios constitucionales «de igualdad, mérito y capacidad», según Bendodo, quien volvió a recordar que se va a iniciar un proceso de auditorías en el sector público instrumental para el que ya existe una partida en el Presupuesto de la comunidad autónoma de este año.

«Crearon una macroestructura que no fueron capaces de gobernar», reprochó Bendodo al PSOE, apuntando que se destinaban 1.000 millones de euros en nóminas del personal de las agencias instrumentales. Sus denuncias sobre la anterior gestión socialista no quedaron aquí, ya que señaló que estas entidades estaban «prácticamente blindadas» a la mayoría de los ciudadanos para acceder al empleo.

En este sentido, indicó que a esos entes entraron personas «como se tenía que entrar», por un concurso u oposición libre cumpliendo con los principios de igualdad, mérito y capacidad, mientras que otras personas «no entraron así». Bendodo señaló que los que entraron por la vía correcta tendrán todo el apoyo de la Junta, pero con los que fueron «enchufados, habrá que analizar la situación».

No obstante, quiso dejar claro que él no critica la creación de estos entes o sus fines y objetivos, sino la forma en que fueron utilizados por los gobiernos del PSOE. En este sentido, recordó que un informe de la Cámara de Cuentas puso de manifiesto que la gestión de los entes instrumentales era «desorganizada, descoordinada, incoherente, ineficaz e ineficiente». Después de que el PSOE le preguntara si se van a despedir a empleados públicos, Bendodo pidió a este partido que no cree alarma entre los trabajadores, porque «los que han entrado por la vía correcta van a seguir». De hecho, el Gobierno andaluz convocará ofertas de empleo público, bajo los principios de mérito, igualdad y capacidad, y ya no hará falta tener el «carnet del PSOE, como ocurría antes».

Por su parte, la diputada del PSOE Ángeles Férriz exigió a Bendodo que dijera «claramente» qué va a hacer el nuevo Gobierno andaluz con los entes instrumentales, «a los que siguen llamando chiringuitos», y, sobre todo, con sus trabajadores, «a los que les faltan al respeto llamándolos enchufados».

Férriz señaló que, cuando el Ejecutivo pone en cuestión a los entes instrumentales, está poniendo en cuestión también a sus trabajadores y reclamó a Bendodo que sea «valiente» y les traslade lo que realmente quieren hacer. «Usted debería defender el empleo público y a los trabajadores y no colocar una espada de Damocles sobre sus cabezas», apuntó. Para la diputada socialista, la única labor de Bendodo fue dedicarse a criticar al anterior Gobierno del PSOE, con «mentiras y manipulaciones». «Deje de jugar con la vida de los trabajadores de los entes instrumentales», volvió a insistir.

El consejero, de su lado, aseguró que lo ocurrido con estas empresas durante la etapa socialistas es un ejemplo «de lo que no hay que hacer con el dinero de todos los andaluces».