Un dibujo de este joven ilustrador vallisoletano iluminará la portada de «Finisterra Ópera Rock», el próximo trabajo de esta banda de folk metal que sale a la venta en noviembre

Este joven vallisoletano de 28 años casi tira la toalla hace unos años ante la dificultad de encontrar un empleo de lo suyo, y cuando empezó a hacerse preguntas sobre si merecía la pena continuar al ver que su trabajo no se valoraba.

De hecho, Marcos Rodríguez González tuvo que cruzar el charco y emigrar a Vancouver, en Canadá, ante la falta de oportunidades para poder desarrollar su profesión como ilustrador y diseñador gráfico. Allí pasó un año haciendo dibujos para señales de tráfico. Pero ahora, su vida acaba de dar un vuelco tras el reconocimiento que acaba de recibir por parte de Mägo de Oz, uno de los grupos de música de España más importantes y con mayor repercusión en el mundo, especialmente en la América Hispana, que ha elegido su dibujo para ilustrar la portada del próximo trabajo de esta banda «Finisterra Ópera Rock».

Una regrabación del mítico disco del año 2000 «Finisterra», con el que el grupo fundado en 1989 por el baterista Txus di Fellatio, obtuvo su primer disco de platino, y que saldrá al mercado a principios de noviembre. «Estoy todavía en una nube», señala a LA RAZÓN este joven artista, que actualmente trabaja en una agencia de publicidad en Zamora, que se define como un perfeccionista al que no le gusta estancarse y está deseando de aprender cosas nuevas cada día. Dice que tiene los pies en el suelo y que todavía no es consciente de la repercusión que puede tener este disco. Y eso que desde que le dieran la feliz noticia, su número de seguidores en redes sociales ha aumentado considerablemente, especialmente de países de habla hispana e incluso de Europa, y de que al día siguiente de saberse ganador le llamaron de un grupo de música de México porque querían hablar con él para un futuro proyecto. Fan incondicional de Mägo de Oz desde pequeño, cuenta que ha hecho realidad uno de sus sueños, y está que muy contento por las felicitaciones recibidas por la propia banda y de miles de fans, pero también y sobre todo, porque formará parte de la historia y la leyenda de su grupo favorito.

Un sector poco valorado

Marcos reconoce que ganarse la vida como ilustrador o diseñador gráfico es difícil hoy en día porque cree que, en general, no se valora este trabajo como se debiera. Pero es optimista por naturaleza y asegura que sigue esforzándose a diario para mejorar y abrirse un hueco en este mundo. Cuenta que fue batería en un par de grupos de música locales, para los que realizó también portadas de disco, y que le gusta el cómic y los tebeos, especialmente los relacionados con temas fantásticos. De hecho, ganó un premio de pequeño con sus dibujos. Pero si algo tiene claro en la vida Marcos, es que si consigue expresar su trabajo como ilustrador y diseñador con la música, su otra gran pasión, «sería el hombre más feliz del mundo».