Castilla y León

Templos y calles repletos de fieles y turistas en un frío Jueves Santo

La inmensa mayoría de las procesiones recorrieron ciudades y pueblos entre el fervor de miles de castellanos y leoneses y visitantes

Cientos de personas acuden al Acueducto para ver pasar a la procesión de la Soledad Dolorosa en Segovia
Cientos de personas acuden al Acueducto para ver pasar a la procesión de la Soledad Dolorosa en Segovialarazon

Un año más los castellanos y leoneses y los turistas que estos días visitan la Comunidad abarrotaron calles y templos para disfrutar de las procesiones que recorrieron los pueblos y ciudades de toda la Región.

La jornada del Jueves Santo discurrió en un despejado pero frío día que permitió salir a la inmensa mayoría de los pasos.

En Valladolid, el día comenzó con el repicar de la campana de la fachada del Palacio de Santa Cruz. Allí, la imponente y realista figura del Santísimo Cristo de la Cruz asomó por la puerta principal, clavado en el madero y sobre un manto de flores púrpura. La pieza del gran escultor Gregorio Fernández, salió a la calle, a hombros de 24 hermanos que tuvieron bajar la talla para permitir su paso por la puerta.

Las miles de personas que llenaban la plaza guardaron silencio para ver salir una de las tallas más queridas de la ciudad, solo roto por el silbar del viento.

También en la capital del Pisuerga, ya por la tarde, la procesión de La Sagrada Cena recorrió las calles del centro de Valladolid, tras salir de la iglesia parroquial de San Pedro Apóstol, y alcanzar su momento álgido con la interpretación de la salve a Nuestra Señora de las Angustias, en la iglesia del mismo nombre, frente al Teatro Calderón.

En León, las plazas vivieron su tradicional cita del Día del Amor Fraterno con los protagonistas del Pregón a Caballo de la Cofradía de las Siete Palabras de Jesús en la Cruz, que llevaron su anuncio de los actos de hoy, Viernes Santo, por los rincones más concurridos de la capital.

Mientras tanto, Ponferrada acogió el acto de liberación de un preso, iniciativa puesta en marcha por la Hermandad de Jesús Nazareno hace ahora un lustro. La procesión de la Santa Cena, que arropa este ritual, se desarrolló este año con un recorrido inverso al habitual, partiendo de la Plaza de la Encina, para continuar por la calle del Reloj hasta alcanzar la Plaza del Ayuntamiento, donde tuvo lugar el Acto del Perdón Fraterno.

Para estrenar su libertad, el preso liberado se incorporó al desfile procesional.

Asimismo, la procesión del Encuentro por el centro de la capital burgalesa marcó la jornada religiosa del Jueves Santo en la ciudad castellana con los Pasos de Jesús con la Cruz a cuestas y de Nuestra Señora de los Dolores, portadas a hombros por miembros de sus respectivas cofradías. Ambas imágenes salieron de las iglesias de San Cosme y San Damián y de San Gil Abad para encontrarse en la plaza del Rey San Fernando.

Finalmente, a partir de las cuatro de la tarde de ayer más de 40 cofrades-penitentes salieron de sus domicilios de Villarrín de Campos (Zamora) llegando poco a poco a la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción. Iban vestidos con sus túnicas y caretas blancas y descalzos. Tras el rezo en la iglesia, junto a la imagen del Cristo, comenzó la procesión en la que los penitentes salieron detrás de la cruz procesional, y tras ellos, el paso de Cristo con la cruz cargada al hombro en un silencio tan estremecedor como respetuoso.