Barcelona

La Fundación Abertis promueve la mejora forestal del Parque del Foix

La Razón
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El 12 de junio del año pasado, las llamas arrasaron 636,44 hectáreas, de las cuales, una tercera parte correspondían al Parque del Foix. Precisamente en este enclave se encuentra el castillo de Castellet, sede de la Fundación Abertis y candidato a ser declarado centro para las reservas de las biosfera mediterráneas de la Unesco. Por ello, y respondiendo a su sensibilidad con el medio ambiente, la entidad se ha marcado el objetivo de mejorar la zona forestal devastada y trabajar para prevenir los incendios.

Durante cinco años, la Fundación Abertis invertirá 20.000 euros anuales para desarrollar los trabajos necesarios que permitan la renovación de la masa forestal y evitar que vuelva a prender. Así lo acordaron ayer el presidente de la entidad y de Abertis, Salvador Alemany; el presidente de la Diputación de Barcelona, Salvador Esteve, y el presidente del Consorcio del Parque del Foix y alcalde de Castellet i la Gornal, Miguel Delgado.

Así, las primeras iniciativas que se llevarán a cabo durante el primer año consistirán en reformar la seguridad y mantenimiento de la torre de vigilancia de Trencarroques; mejorar la red vial de vigilancia y extinción de incendios del parque así como la señalización de caminos; renovar los equipos de producción agrícola; realizar estudios de seguimiento de la fauna avícola; llevar a cabo labores para proteger la fauna anfibia del pantano y control de poblaciones alóctonas; además de organizar jornadas de divulgación de la fauna y colaborar en actividades de fomento de la biodiversidad.

Rápida recuperación

Tras sellar el acuerdo, los representantes de los tres organismos, Alemany, Esteve y Delgado, visitaron el llamado Fondo de la Garçosa, donde, precisamente, se originaron las llamas que rápidamente se propagaron por el Parque del Foix, situado en el término municipal de Castellet i la Gornal y afectando también a 428,19 hectáreas de Vilanova i la Geltrú.

Todos pudieron comprobar que la zona se está regenerando de forma natural y a buen ritmo, por lo que no será necesaria la repoblación forestal artificial, explicó la Fundación Abertis en un comunicado. La especie de árbol mediterráneo más arraigada en la zona es el pino blanco, «que es de tipo pirófito y está acostumbrado a regenerarse solos tras un incendio».