Sant Antoni duplica sus ventas tras la reapertura

Más de un millón de personas han visitado el popular mercado desde que abriese sus puertas el pasado 23 de mayo.

A falta de conocer el impacto real sobre el barrio del renovado mercado de Sant Antoni, su primer mes de andadura se salda con un éxito rotundo. Desde que abriera sus puertas el pasado 23 de mayo, ha recibido más de un millón de visitas y los comercios han duplicado sus ventas. Los miedos sobre el impacto que tendría sobre el turismo o los riesgos de que se convirtiera en una Boqueria 2.0 parecen, por ahora, injustificados.

Así las cosas, un mes después del estreno del nuevo mercado de Sant Antoni vecinos y comerciantes del barrio hacen un buen balance de la remodelación. El concejal de Comercio y Mercados, Joan Colom, ha asegurado que el mercado de Sant Antoni «ha recuperado el pulso como proveedor de producto fresco de primera calidad y como proveedor de producto no alimentario para los vecinos, y el volumen de ventas incluso supera al de las que se hacían en el mercado provisional», donde los paradistas pasaron los nueve años que ha durado la reforma. Junto a la cifra de un millón de personas que han pasado por el mercado de Sant Antoni en un mes, Colom ha destacado la importancia de que haya consolidado la de 20.000 en días laborables, 35.000 los sábados, día de mayor venta en este mercado barcelonés, y más de 20.000 los domingos en que o abre el mercado de libros.

Comercialmente, las ventas en los puestos casi se han duplicado, hasta el punto de que han tenido que contratar más personal para hacer frente al incremento. Creen que el nuevo equipamiento ha hecho reavivar las compras en las tiendas de Sant Antoni y también la vida vecinal en la calle. De momento, aseguran que el mercado no ha vivido un aumento de turistas que visitan el barrio, pero se muestran atentos al efecto llamada que puede tener el nuevo edificio de cara al verano.

Para los comerciantes de Sant Antoni, después de nueve años, se ha redescubierto el tejido comercial del barrio. El presidente de Sant Antoni Comerç, Vicenç Gasca, asegura que algunos establecimientos han aprovechado para hacer reformas y adecuarse así al nuevo mercado. Además, los comerciantes del mercado del fresco afirman que casi han duplicado las ventas y que han tenido que contratar más personal.

Gasca también apunta que la oferta comercial de San Antonio es diferente a la de otros puntos de Barcelona. De hecho, los comerciantes también están contentos porque muchos barceloneses han recuperado el mercado para hacer sus compras semanales. Además, hasta ahora no han notado un incremento de turistas.

Colom, que es también concejal de Turismo, ha asegurado también que el mercado de Sant Antoni funciona como «punto de venta para los vecinos» como se pretende y no se está convirtiendo en un punto de atracción turística aunque haya cierta presencia de turistas.

El concejal ha señalado que los propios paradistas son los primeros defensores de que el mercado sea para sus clientes y el principal instrumento para hacer que el mercado no se convierta en una atracción turística.

Después de nueve años de obras, el mercado ha abierto con 226 establecimientos, de los cuales 52 corresponden al mercado de producto fresco (alimentación), 95 a los ‘encants’ (no alimentario) y 78 en el dominical de libro.