CSIC

Un estudio reproducirá el ADN de los inmunes al VIH para hallar una cura

Los científicos confían en que se pueda conseguir un sistema inmune al virus de forma permanente.

El consorcio creado por IrsiCaixa, CESIC y dos empresas farmacéuticas han desarrollado y financiado este proyecto.
El consorcio creado por IrsiCaixa, CESIC y dos empresas farmacéuticas han desarrollado y financiado este proyecto.larazon

Los científicos confían en que se pueda conseguir un sistema inmune al virus de forma permanente.

En 2010, investigadores de la Universidad de Minessota descubrieron que alrededor del 1% de la población europea es inmune de forma natural al VIH. La razón se encuentra en una mutación genética–llamada CCR5-Delta32–, que impide que las células que funcionan como puerta de entrada del virus al sistema inmune no funcionen. Precisamente estas personas resistentes a la enfermedad serán las que muestren el camino hacia su cura. Y en este contexto, uno de los proyectos más esperanzadores es el «Stop Sida», desarrollado y financiado por el consorcio formado por cuatro entidades: el Instituto de Investigación del Sida (IrsiCaixa), el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y las empresas Karuna Good Cell Technologies y Praxis Pharmaceutical.

Dotado con un millón de euros

La idea de este estudio, dotado con un millón de euros, es reproducir la mutación que genera inmunidad al VIH a través de una terapia genética para insertarla en las células de las personas infectadas con el virus, con el objetivo de que su propio organismo pueda destruirlo.

La primera fase del proyecto, liderada por el CSIC, consistirá en utilizar los últimos avances en edición genómica desarrollados y patentados por algunos de los miembros del consorcio para modificar in vitro los linfocitos T CD4 de personas infectadas por el VIH, impidiendo así que expresen la proteína. Los científicos ya han demostrado en estudios anteriores que esta proteína puede ser manipulada sin prejuicio para el paciente, La infusión posterior de estas células modificadas permitiría al paciente contar con un cierto porcentaje de linfocitos T CD4+ resistentes al VIH.

Sin embargo, el porcentaje de células resistentes podría mejorarse partiendo de células madre hematológicas, por lo que, una segunda fase consistirá en aislar células madre del propio paciente, inactivar el gen y transferirlas de nuevo al paciente, lo que se conoce como trasplante autólogo. Los científicos confían en que de esta forma se podría conseguir un sistema inmunitario resistente al VIH de forma permanente.

Durante los 3 años de duración de proyecto, se prevé la realización de estudios tanto in vitro como en modelos animales, que servirán para determinar la seguridad, así como la eficacia del procedimiento.