Valencia

Viguer aconseja «imaginación» a las empresas para evitar delitos

La Razón
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El juez decano de Valencia, Pedro Viguer, recomendó ayer a las empresas «imaginación» para diseñar planes de prevención del delito que incluyan un canal de denuncias a través del cual los trabajadores puedan dar cuenta confidencialmente de los desmanes que se realizan en su empresa. La omisión de este plan de prevención hará que las responsabilidades penales de los ilícitos recaigan sobre los administradores de las empresas.

La reforma del Código Penal de 2010 introdujo la responsabilidad penal de las personas jurídicas, pero la falta de desarrollo normativo hacía difícil la aplicación del precepto. El proyecto de ley de reforma del Código Penal actual incluirá «el reconocimiento expreso de que un modelo de prevención adecuado puede ser considerado circunstancia eximente de la responsabilidad penal de la persona jurídica», y así mismo supondrá «la introducción de un nuevo delito que sanciona a los administradores sociales que no adopten los modelos de prevención adecuados para evitar la comisión de delitos».

Viguer, que inauguró ayer una jornada en Cierval sobre el «Modelo de Prevención y Detección de Delitos», enfocada a evitar la responsabilidad penal de las personas jurídicas, señalo que «hay que diseñar protocolos de control porque en sentido contrario surge la responsabilidad de los administradores, cuando no ha habido prevención. Se da pues la culpabilidad por defecto en la administración. Es la culpabilidad por omisión».

Viguer recomendó, una vez se ha demostrado muerto el latinajo de «societas delinquere non potest», la sustitución por el barbarismo «compliance» que hace referencia a los protocolos de prevención del delito exigidos por el nuevo Código Penal.

La «compliance penal» tendría su adecuada traducción en la «observancia penal», si bien el anglicismo ha sido aceptado sin más en la jerga jurídica empobreciéndola.

El juez decano dijo que era el momento de impulsar estos planes de prevención y que había que «ponerles imaginación» ya que había poco escrito sobre ellos, y que sería la hermenéutica de las sentencias primero de las audiencias provinciales, luego de la Nacional y luego del Supremo, las que marcarían la línea, pero que para eso habría que esperar años.

Por ello, recomendó también «mirar hacia Europa» para ver por dónde van las tendencias en la elaboración de estos planes.