Transporte

Invitan a la alcaldesa a probar con su bici el carril ciclista de Ascao

El colectivo Madrid Ciclista denuncia la peligrosidad de esta vía y exige a Carmena su eliminación.

El carril ciclista de Ascao está entre los carriles habituales y una hilera de vehículos aparcados que lo invaden constantemente
El carril ciclista de Ascao está entre los carriles habituales y una hilera de vehículos aparcados que lo invaden constantementelarazon

El colectivo Madrid Ciclista denuncia la peligrosidad de esta vía y exige a Carmena su eliminación.

Están hartos de sortear los peligros que les acechan a diario cada vez que cogen sus bicis e intentan circular por la capital. Por eso, el colectivo Madrid Ciclista ha lanzado una invitación a la alcadesa que, esperan, no rechace. En concreto, piden a Manuela Carmena –a través de una propuesta en la plataforma de recogida de apoyos Change.org– que pruebe personalmente el carril bici de Ascao. «No le deseamos ningún mal, pero sabemos que es ciclista y queremos llamar su atención sobre accidentes que se pueden producir en este carril bici», explica Carlos Enjuto, portavoz del colectivo de ciclistas. En la petición, que ha recogido ya 134 apoyos, piden a la alcaldesa «que coja una bici con nosotros y recorra personalmente el carril bici como se supone que miles de ciclistas lo van a hacer en el futuro. Tenemos la esperanza de que experimentando de primera mano la peligrosidad de esa infraestructura la alcaldesa pida que se borre y que se cambien los criterios que el Ayuntamiento está utilizando para la segregación de los ciclistas».

Ya fue «mejorado»

El carril bici de las calles Ascao y Francisco Villaespesa sumó el rechazo de todos los colectivos pro bicicleta de Madrid tras su creación. Se encuentra entre una zona de aparcamiento de vehículos y dos carriles destinados al tráfico de transporte público y privado. Una ubicación en la que los vehículos que buscan aparcamiento entorpecen la marcha de los ciclistas cuando los conductores tienen que entrar o salir de las plazas destinadas al estacionamiento e, incluso, durante las maniobras de aparcamiento en las que tienen que invadir el espacio reservado a los ciclistas. «Han ensanchado el carril poniendo una segunda línea discontinua. También han pintado un ciclocarril 30 (los que limitan la velocidad) al lado», reconoce Enjuto que ha sucedido recientemente en Ascao, cuando sus quejas llegaron hasta la Junta de Distrito de Ciudad Lineal. Y, si bien la solución ha sido del agrado de algunas asociaciones ciclistas, desde Madrid Ciclista consideran que estas modificaciones han sido «insuficientes». «Sigue siendo estrecho, pegado a los coches aparcados en una zona de apertura de puertas. Su diseño es nefasto, en eso estamos todo el colectivo de acuerdo», añade.

El portavoz de Madrid Ciclista llama la atención sobre que en la capital «nunca ha habido tantas bicis y ciclistas como los que circulan por la ciudad en este momento». Y subraya que el problema de Ascao no es el único que el Ayuntamiento de Madrid ha provocado a los ciclistas en los últimos meses. Así, recuerda las denuncias que han puesto en este tiempo sobre los carriles bici de la calle Toledo, Santa Engracia o la calle Aquitania. «Las improvisaciones acaban poniéndonos en peligro y Ahora Madrid está llevando esas improvisaciones al extremo», concluyó Enjuto.